De los fumadores podemos aprender la tolerancia. Todavía no conozco uno sólo que se haya quejado de los no fumadores.Sandro Pertini.
El argumento ¿liberal? "quien no quiera entrar que no entre" no es válido por dos razones. Una, los camareros entran quieran o no quieran. Dos, los clientes no fumadores son mayoría (cerca del 75% de la población no fuma*), mientras que los locales habilitados para no fumadores son minoría (solamente un 12%). Es decir, es mucho más probable encontrar un sitio con humos que sin humos, a pesar de que a la inmensa mayoría no nos gustan los sitios con humo, fumadores incluido. ¿Qué hacer? Hum... una de dos, o se nos ocurre alguna idea para aumentar drásticamente ese 12% hasta situarlo en un 70-80%, o prohibimos fumar en todos los locales y a otra cosa mariposa :o)
(*) Fuentes: Wikipedia y Wonkapistas.