Por Hogaradas
Una inminente visita a Bustiello, ese ha sido el resultado de la maravillosa lectura del libro de Laura Sбnchez “Dejar las cosas en sus dнas”, la necesidad imperiosa de visitar los lugares que tan bien describe en su libro e intentar imaginar en cada uno de ellos a los personajes que sin ser en la mayor parte de los casos reales, se han convertido en tales y cuyas historias ya han quedado grabadas en mi memoria para siempre.
El poblado minero de Bustiello, un conjunto levantado entre 1890 y 1925 por la Sociedad Hullera Espaсola, una relevante empresa minera del grupo industrial del Marquйs de Comillas, es el lugar en el que se desarrolla esta historia que nos lleva del pasado al presente, ese en el que la nieta de dos de los protagonistas se afana por descubrir toda la historia del pasado de su familia a la vez que descubrir quй ha sido de su abuelo en su huida por las montaсas asturianas durante la Guerra Civil.
Aida conocerб a travйs del relato de Paloma, la ъnica hermana viva de su hermana, todas las vicisitudes de la infancia y la adolescencia de las niсas de Pomar, de su familia, y de todos los personajes que magistralmente gracias a la autora han ido poblando Bustiello, ficticios la mayorнa, pero con similitudes a quienes habitaron el poblado en aquella йpoca; de hecho la finca de Pomar existe, y si bien no era tan numerosa como la que nos narra el libro, sн existe similitud entre ambas.
Recuperar la memoria histуrica y descubrir cuбl ha sido el paradero de su abuelo en su huida por los montes asturianos durante la Guerra Civil, descubrir si entre aquellos huesos se encuentran los de quien encandilу a su madre desde el primer segundo en el que se perdiу en la inmensidad de sus ojos azules, los mismos que hoy descubrimos en Aida, su nieta, los que ella descubre tambiйn en uno de los protagonistas junto con aquel abrazo, premonitorio, porque nada mejor para transmitir sentimientos que el contacto piel con piel.
Para quienes, al igual que la protagonista, hemos nacido y crecido en la cuenca minera, la lectura de “Dejar las cosas en sus dнas” ha sido todo un placer, por el reflejo tan fiel que hace de aquella йpoca, producto de un proceso exhaustivo de documentaciуn, por descubrir el poblado minero de Bustiello, fiel reflejo del paternalismo industrial de la йpoca, por estar empapado de asturianнa a travйs de canciones, refranes, expresiones, palabras… y por dotar a todos y cada uno de los personajes de la novela de tanta vida. A medida que van apareciendo en la historia les vamos poniendo cara, voz, y se van convirtiendo en miembros de nuestro propio pasado familiar, hasta el punto de que llegado el final sentimos la misma tristeza que cuando nos separamos de un ser querido.
Quienes desconozcan la historia de la minerнa y de las comarcas mineras disfrutarбn sin duda descubriendo a travйs de todos y cada uno de los personajes de esta novela cуmo discurriу la vida en esta comarca minera en los primeros aсos del siglo XX, y tendrбn ademбs la suerte de hacerlo a travйs de una novela cuajada de personas que van y vienen, cuyas historias se entrelazan, que nos llevan del pasado al presente, y a los que es imposible dejar de seguir porque su autora, Laura Castaсуn, ha conseguido magistralmente, a base de un excelente buen hacer literario, engancharnos a ellos desde el primer segundo de lectura.