Millones de usuarios tiene la red social más interactiva de todas, Facebook, y millones de personas que cada día comparten aquello que más les gusta y animan a sus familiares y amigos a conocer cuanto aman, sienten y veneran. Pero si hay algo que llevaban los usuarios de Facebook mucho tiempo reclamando era la creación de un botón para marcar cuando algo no nos gusta. La petición se ha hecho algo más real, aunque puede que incluso sea exagerada. Ahora es posible odiar entre amigos con “Hate with Friends“.
Sin embargo, el invento dista mucho de ser lo que nosotros esperábamos. Y es que más que invitarnos a la empatía con un amigo al que hemos socorrido en momentos difíciles marcando “me gusta” en sus publicaciones sólo por hacerle ver que estamos ahí, aunque se trate de las publicaciones más trágicas y miserables, lo que hace “Hate with Friends“, es poco menos que apología del odio.
¿Diversión o barbaridad?
Quienes han creado la página en cuestión, porque de eso se trata, de unapágina donde marcar y señalar a amigos, familiares o compañeros de trabajo que no nos gustan, asumen que no esperan que su creación vaya a gozar del éxito absoluto, aunque lo presentan como una nueva luz. Una luz que más bien podríamos decir que, en lugar de enseñarnos el camino de la felicidad y el bienestar más progreso, nos conduce directos al abismo.
No obstante, se escudan también alegando que el bullying ya existía a antes de esta página. No sea que ahora suceda algo y le echen el marrón aFacebook. Y es que no hay que dramatizar el hecho, pues se trata sólo de ofrecer la oportunidad al usuario, cansado de los cauces legales oportunos, de preparar una pequeña e inocente venganza a sus enemigos más cercanos. Un escarmiento a aquéllos que nos fastidian el día a día. Una diversión sana y compartida.
El tiempo nos dirá cuántas víctimas se cobra este nuevo invento de Facebookque, a todas luces, planea hacer una limpia de la red social. Y quién sabe si acabe hasta con denuncias. Una pena malgastar nuestro valioso tiempo en enfrentamientos con nadie.