Hace un par de
semanas leí un artículo en prensa que me hizo reflexionar sobre la paradoja de
la guerra por el talento, a pesar de la crisis y el elevado nivel de paro.Está claro que
los profesionales con un desempeño normal no tienen un impacto suficiente para
conseguir los resultados empresariales como el de los profesionales que son verdaderamente
“brillantes”.Si tuvieras que
medir el grado de satisfacción de tu desempeño del 1 al 10, ¿dónde estarías tú en
este momento? Situándonos ahora en los entornos inciertos y turbulentos que vivimos
en nuestras empresas, ¿eres suficientemente creativo capaz de motivar a tu
equipo?, puntúate también del 1 al 10. Si
ahora revisaras de nuevo el resultado de tu nivel de satisfacción, ¿sería el
mismo?Sólo quería
sensibilizarte para que tomaras mayor conciencia de cómo se está re-enfocando la
demanda laboral. Se requieren profesionales con una mezcla de conocimientos
técnicos y conocimientos mucho más especializados, con sabiduría capaz de
desarrollar el negocio y el marketing para retener consumidores – clientes –
personas y con experiencia en gestión eficiente de equipos con “autonomía
dirigida” para mejorar el desempeño de cada uno de ellos y de uno mismo.¿Qué más deseas
hacer para ser y sentirte un profesional brillante?En claves
empresariales, ser brillante significa ser excepcional. La excepcionalidad
conlleva valores, conductas ejemplares en la gestión de los equipos y en la
consecución de resultados empresariales. La lucha por el
talento se está encarnizando cada vez más entre las empresas por tener mejores profesionales con una gran capacidad de autogestión y co-creación, con una cultura orientada a resultados, al alto
rendimiento.Tener talento innovador implica cooperación
creativa y trabajo en equipo. Tener talento
inspirador enseña a los demás el arte de sacar provecho a lo que es propio
de cada persona, de modo que cada persona se vuelve “indispensable” en la
organización en virtud de sus capacidades. Talento
comercial también.Estas son las
garantías para estar en activo y con plena satisfacción por contribuir a la
sostenibilidad de la empresa. Sin embargo, el mantenerse con un desempeño
normal puede llevarte a situaciones desalentadoras.¿Qué más puedo
hacer yo para contribuir al cumplimiento de los objetivos de mi empresa?Hay herramientas
que pueden acompañarte en este viaje hacia tu excepcionalidad. Trata de pensar
desde esta nueva perspectiva y tu valor en el mercado crecerá.