Del oricalco o latón, blenda y calamina en la Sierra de Cartagena.
Al este de la ciudad de Cartagena se levanta la sierra minera, entre el Mediterráneo y la llanura del Mar Menor. Sus relieves más altos no superan los 450 metros, en forma de cerros o cabezos.Durante el neógeno se vio afectada por fenómenos volcánicos,que generaron depósitos minerales ricos en plomo, plata, hierro, zinc, manganeso, y en menor proporción cobre y estaño. Desde hace dos milenios y medio este excepcional lugar ha sido explotado por la minería. Cartagineses y romanos primero, y un fuerte auge durante la segunda mitad del siglo XIX y primera mital del XX.
En este blog hemos considerado los metales desde la perspectiva de su uso en la antigüedad, y hemos comentado sobre el cobre, el bronce y el hierro, como materias cuyos procesos de obtención y después su uso han sido utilizados por los historiadores para caracterizar períodos. También hemos presentado aquí alguna entrada sobre el plomo y la plata, tan ligados entre sí por el proceso de obtención de esta última, y su valor histórico y económico como medio de pago.
Nos preguntamos por el valor del zinc desde una perspectiva histórica. ¿Fue aprovechado por los romanos? ¿Para qué? Hoy no cabe duda que su uso industrial es diverso e importante, pero no es nada habitual mencionar este metal referido a la antigüedad, excepto como calamina.
Tampoco los romanos conocieron el indio, el germanio o el galio, que se hallan en las blendas, ni los procesos metalúrgicos para separar del zinc el cadmio, que sí usaban bajo la denominación de calamina.
La blenda es la principal mena del zinc, metal que se utiliza hoy para galvanizar el hierro impidiendo su oxidación, y que aleado con el cobre da el latón. Es un mineral oscuro, pesado y brillante, y a menudo aparece entremezclado con la galena, que es de color gris plomo, con exfoliación cúbica perfecta, brillo más metálico, más blanda y más pesada. Distinguirlas era importante para los mineros del plomo, del cual buscaban su contenido en plata, por lo que se dice que la palabra blenda viene de “ofuscar” en alemán. Su aprovechamiento minero en la región del sureste ha tenido gran importancia, destacando los distritos de Cartagena, La Unión y Mazarrón. Otras mineralizaciones menos importantes se dan en las poblaciones de Águilas, Lorca y Zarzadilla de Totana. La variedad de blenda de esta región es la denominada ferrífera, o marmatita, bien en masas granudas o agregados de cristales.
El latón es conocido desde antes de que el mismo zinc, como metal, fuese descubierto. Entonces se producía mediante la mezcla de cobre con una fuente natural de zinc, la calamina. Con este término designaban los mineros la mezcla que aparecía frecuentemente en la parte alta de las minas de cinc, las monteras. Allí encontraban la hemimorfita, lasmithsonita y la hidrocincita, de cinc, reconocibles por su color blanquecino.
Las citas de escritores griegos sobre el latón u oricalco incluyen a Hesíodo, que nos describe de este metal las grebas de Herakles, cinceladas por Hefesto; a Homero que en un Himno a Afrodita describe sus arracadas o pendientes como de oricalco, o al mismo Platón, que lo relaciona con la Atlántida y lo considera el metal más valioso después del oro. Los autores romanos reiteran este valor: para Flavio Josefo, los vasos del Templo de Salomón eran de oricalco. De particular interés es la descripción de Plinio el Viejo que atribuye al oricalco un uso más prosaico y comprobado hoy, el de hacer cospeles para acuñar monedas, pues era el que mejor absorbía la cadmia para hacer sestercios y dupondios.
¿Pero qué pasó con decenas de miles de toneladas de blenda metálica? ¿Eran desechadas a la escombrera en la selección de las pintas de galena de plomo? Pienso que una buena parte de esta blenda, de aprovechamiento desconocido entonces, pasaría a los lavaderos, por ir mezclados ambos minerales con frecuencia. Supongo que la flotación permitiría separar el plomo, más pesado, ¿y la blenda?
No será hasta 1.860 cuando se comience a utilizar para producir zinc industrial.
Durante el reinado de Fernando VII se inició una nueva etapa en la minería cartagenera. Se reabrieron los antiguos pozos mineros romanos, y al mismo tiempo se procuraba el beneficio de las antiguos escombreras romanas.
Crisol. Fundición del latón. ¿Se recuperaron los millones de toneladas que debía haber en las escombreras? ¿Se optó por arrancar más mineral, con el inicio de las explotaciones a cielo abierto? No lo sé. Al menos creo que he aprendido a dar más valor al esfuerzo para obtener metal de los hombres a lo largo de los siglos. Y también a comprender la relación estrecha que existe entre la minería, la metalurgia, la industria y nuestra sociedad de consumo, ¿no te parece, amigo lector?