Llegué a Sharm El Sheikh a las 23:35 de la noche. Yo había contratado un auto al hotel a través de Sharm Club así que después de recoger mi valija encontré al chofer en la puerta con un cartel con mi nombre. El transfer me salió 7 £. Aclaro esto. Como en esta zona hay muchas agencias de origen británico, los precios están en libras esterlinas. Así que si viajan a Egipto, fíjense que pueden darles los precios en cuatro monedas distintas: libras egipcias, dólares, euros y libras esterlinas. Por suerte pagué online por lo que no me preocupé por la conversión. También contraté con ellos el traslado del hotel al aeropuerto. Son puntuales y serios.
Llegué al Sharm Reef Resort a medianoche. Había contratado el hotel a través de Booking y la verdad es que me gustó mucho. Buen precio y buen servicio. La habitación era amplia y muy cómoda con un gran ventanal con vistas a la piscina. El desayuno buffet era im-pre-sio-nan-te! Había de todo. Ducha caliente, televisión con pantalla plana, botellas de agua mineral de regalo, jugos en la recepción, hermosos jardines, varias piletas, bar, playa privada, etc. Nunca había ido a un resort y fue una buena experiencia aunque es tan grande que tenía que caminar una cuadra para ir a desayunar. Sólo puedo quejarme del wifi que únicamente era bueno en la recepción.
Esa noche llegué, me duché y me acosté porque al otro día ya tenía contratada una excursión.
Me levanté y fui a desayunar. El comedor está un poco lejos de las habitaciones pero finalmente lo encontré. Me pasaron a buscar puntualmente para ir a hacer snorkel en la isla Tiran. En principio yo quería hacer snorkel en el Parque Nacional Ras Mohammed, pero ahí me enteré que esa excursión no la hacen todos los días, sólo dos veces por semana. Creo que los miércoles y domingos. La excursión (por suerte en Sharm El Sheikh los tours son grupales) me salió 490 LE, muy barata. A eso hay que agregarle el alquiler de las aletas y el traje de neoprene porque el agua estaba media fría (75LE). Yo ya llevaba mi máscara de snorkel. Tuvimos que esperar un rato en el puerto hasta que se juntó toda la gente.
Subimos al barco Rosetta II y me puse a charlar con unos ingleses. Navegamos por el Mar Rojo (y yo pensaba en la historia de Moisés abriendo las aguas) que no tiene nada de rojo hasta llegar a un barco hundido. Muy cerca de ahí hicimos la primera bajada de snorkel. Y a pesar del traje de neoprene me morí de frío. Salí tiritando. ¡Hay que ir en verano!
Almorzamos en el barco.
Seguimos navegando y realizamos dos nuevos descensos. Como estábamos más próximos a la costa ya no sentí tanto frío. Vimos una morena y una manta raya. No es Galápagos, pero es interesante.
Volvimos al hotel, me duché y me acosté. ¿Qué hora sería? ¿Las seis de la tarde? A la madrugada tenía mi última excursión del viaje. (Y la más cara ya que costaba 180£).
Me desperté a la una de la mañana. ¿Por qué? Porque me pasaban a buscar a las 2:15am. Resulta que hay que juntar a todo el grupo así que se sale bien temprano. Agarré la caja de desayuno que había pedido el día anterior y salí. El auto me llevó hasta las afueras de la ciudad donde subí a un micro. Ahí tuvimos que esperar que llegara todo el mundo. Partimos. Una hora después paramos en un negocio llamado Master Dahab (Dahab) donde pasamos al baño y compramos alguna pavada en el kiosko. Seguimos viaje. Dos horas más y estábamos en Taba, un sitio muy elegante en la frontera con Israel. Sinceramente no me imaginaba que Taba fuera tan lindo lugar. ¡Me hubiera quedado! Cuando bajamos del micro nos asignaron un número (yo era el 48) de manera de no perdernos. Hicimos los trámites migratorios de forma exprés y subimos al ferry para navegar el golfo de Aqaba hasta Jordania. ¡Me sentía en Aladdin! Tras una media hora llegamos a Jordania sin cruzar Israel. El muelle de Aqaba es super exclusivo. Una zona muy rica. Migraciones y luego nos dividimos en dos grupos. Los que hablábamos inglés (había también un matrimonio argentino) y los que hablaban ruso. Cada grupo con su guía. Paramos en el centro de la ciudad para pasar a un baño público muy limpio.
Jordania es, a diferencia de Egipto, un país con una economía fuerte. Por esa razón, su moneda -el dinar- vale aún más que el euro y mis libras egipcias no servían para nada. Todo es más caro allá. Tardé en darme cuenta que había llegado a Asia. Otro continente. Seguimos en el bus por el desierto hasta un bazar (Desert Castle Bazar) donde pasar al baño. Algunos aprovecharon a tomar un café y comprar algún souvenir. Yo compré un llavero. Luego continuamos viaje hasta Wadi Musa, el pueblo donde se encuentra el sitio arqueológico de Petra. A las 10:30 entramos a Petra.
Repasemos horarios. A eso de las 3 de la mañana salimos de Sharm el Sheikh. A las 6 salía el ferry hacia Aqaba. Digamos que a las 7 salíamos de Aqaba, tal vez un poco más. Unas 3 horas hasta Petra porque paramos un rato en el bazar.
Lo ideal (para la próxima) es viajar desde la capital de Jordania y hospedarse en Wadi Musa. El pueblo es lindo y tiene muchas posibilidades de alojamiento. Vale la pena porque en un solo día no puede verse todo. Se necesitan al menos dos días para el sitio arqueológico. Además hay otros lugares para visitar por la zona. Yo lo sabía pero no podía agregar más días. Jordania me pareció más occidental que Egipto.
Petra, la capital de los nabateos, tiene más de 2000 años. Prosperó como parte vital de la ruta comercial que conectaba Mesopotamia y Egipto. Luego se anexó al imperio romano.
¿Qué se puede visitar?
- El centro de visitantes* (me quedó pendiente)
- Bab Al Siq, el sendero principal donde se encuentran los bloques Djinn.
- La presa para desviar las riadas de Wadi Musa.
- El Siq o garganta de 1km de longitud.
- El Tesoro o Al Khazna, con 40 mts de altura. Todavía se desconoce su función original.
- La avenida de las fachadas.
- Lugar elevado del sacrificio*. Dicen que en la cumbre se tienen las vistas más espectaculares de Petra, pero hay que tener tiempo para subir y yo no lo tenía.
- El teatro con lugar para 4000 espectadores.
- Las tumbas reales: Tumba de la Urna, Tumba de la Seda, Tumba Corintia y Monumento del Palacio.
- El ninfeo*, una fuente pública semicircular.
- La iglesia*.
- La calle columnata*.
- El gran templo*.
- Qasr al-Bint, templo dedicado a Dushara*.
- El triclinio del león*.
- Ad Deir o el monasterio*. Realmente quería conocerlo pero me quedaba muy lejos.
Empezamos el recorrido por Petra, un recorrido rápido con lo fundamental. ¿Qué puedo decir? Aún sin las huellas de los nabateos, el paisaje es espectacular. Y la garganta es impresionante. No tengo palabras. De repente empezás a ver esa imagen de película, tu corazón corre a mil y estás delante del Tesoro. Sentís que en cualquier momento aparece Indiana Jones. Es hermoso, aunque no pidan sacarse una foto sin gente, porque eso es imposible. Seguimos caminando hacia el teatro romano y las tumbas reales. No llegamos más lejos. Los colores de las piedras son de no creer, y eso que yo estuve en Talampaya. Emprendimos el regreso. Estuvimos unas tres horas. Hubiera necesitado todo el día. Corrí porque a las 14:45 teníamos que estar en la puerta. Debí haber pagado una mula o un caballo para no cansarme. Fuimos a almorzar (buffet). La comida estaba incluida, no así la bebida. Pero como no tenían cambio no me cobraron la gaseosa que pedí. Emprendimos el regreso. Sin paradas hasta Aqaba para migraciones. Anochecía. Subimos al ferry, soy número 48, y el cielo estrellado sobre el mar, las luces de Israel y finalmente Taba y migraciones otra vez.
La vuelta se hizo larga, con una extensa parada en Dahab. Llegué al hotel a las 23:30, más muerta que viva pero feliz. Me duché y me acosté.
Después de todo lo que había hecho, el último día en Sharm el Sheikh decidí pasarlo aprovechando los beneficios del hotel. Estaba muy cansada para otra excursión. Me levanté tarde, comí un flor de desayuno y fui a la playa privada del hotel con mi snorkel (aunque es cerca te llevan en un autobús). Se puede pasar ahí todo el día. Tiene baños, restaurantes, juegos, quinchos, animadores, reposeras, etc. No tenía playa propiamente dicha pero sí un muelle donde tirarse a hacer snorkel. El agua era fría pero me metí igual. Nadé un poco entre muchos peces que se mezclaban con la basura. Se nota que las corrientes arrojaban la basura a la costa. Después de empezar a nadar ya no se sentía tan fría. Volví en el bus de las 13hs al hotel. Ahí aproveché para nadar primero en la pileta principal el hotel, enorme pero helada (parecía una pileta de club). Luego descubrí una pileta más pequeña pero con agua templada, así que estuve ahí un largo rato.
A las 15 me duché y decidí que ya era hora de almorzar. El restaurant del hotel ya estaba cerrado así que crucé al shopping Il Mercato y comí pastas con mariscos en Onions. Comí tan tarde que no cené luego. Caminé por el shopping, es muy interesante.
Más tarde organicé mi valija, tomé un jugo en el bar junto a las piletas y a eso de las 20:30 me encontré con los ingleses que había conocido en el tour. Fuimos juntos caminando al Viejo Mercado. Visitamos los negocios y tomamos un té en Q8. Me llevaron en taxi de vuelta al hotel. Dormí satisfecha. Me gustó mucho Sharm el Sheikh.
Al otro día tuve mi último gran desayuno. Me pasaron a buscar a las 10:15 y llegamos bien al aeropuerto. El avión a El Cairo salió puntual. Fui al hotel que me había reservado el guía Mostafá. Almorcé pizza en mi habitación y me di un baño de inmersión. Al día siguiente ya estaba en el aeropuerto a las 6:30. Fue un poco engorroso y largo pero finalmente pude recorrer el Free Shop y comprar algunas cosas sin el problema del regateo. Finalmente salimos hacia Madrid.
Me hubiera gustado tener más tiempo para hacer otra excursión en Sharm el Sheikh: el Parque Nacional Ras Mohamed, el Cañón de colores, el monasterio de Santa Catalina y la montaña de Moisés, un paseo en camello con cena en tiendas beduinas, un paseo en barco pirata, un paseo en cuatriciclo por el desierto…
DATOS:
- Me recomendaron el hotel Coral Hills Resort. Es barato y está ubicado muy cerca de donde yo estuve.
- En la zona hay minería así que se pueden comprar turquesas y malaquitas.
- La empresa con la que fui a hacer snorkel y que contraté para ir a Petra se llama Sharmers Excursions. Muy serios. Hay otra que se llama Sharm Touring que también parece buena.
- La excursión a Petra la reservé por facebook con bastante tiempo de anticipación y tuve que mandarles fotos de mi pasaporte. No la hacen todos los días.
- Tours que se pueden hacer desde Aqaba: Wadi Rum con cena beduina y visita a la casa de Lawrence de Arabia, Mar Muerto con Betania, monte Nebo y Madaba “la ciudad de los mosaicos”. https://wonderstourism.com/
- No tiren el ticket de entrada a Petra ya que les permite hacer en caballo el recorrido desde la entrada hasta Siq y un tour guiado en el camino principal (7am a 4pm).