En las próximas elecciones, los ciudadanos de la Unión Europea nos jugamos nuestro futuro. Y no solo para los próximos cinco años, sino, posiblemente, para toda una generación. Estas elecciones, en las que habitualmente suele haber una elevada abstención, son de extraordinaria importancia, pues es desde Europa desde donde se nos está imponiendo un nuevo modelo político, social y económico: el neoliberalismo.
En el neoliberalismo, los derechos sociales no existen. Los neoliberales no encuentran ninguna razón para que el Estado, sufragado con los impuestos de los contribuyentes, proporcione unos derechos sociales básicos a la ciudadanía. Tampoco entienden que los mercados estén regulados (como lo están el tráfico, la pesca, y cualquier otra actividad en el que la acción de una persona repercuta en las demás) y se atengan a normas y leyes, para evitar que el instinto de algunos por enriquecerse todo lo posible, no provoque el empobrecimiento de otros. Y, desde luego, no pueden soportar que cualquier decisión popular y democrática de la mayoría, pueda suponer un obstáculo para sus intereses, por eso son firmes detractores de la democracia, por eso impusieron gobiernos “tecnocráticos” (eufemismo para decir que apartaron de su puesto al presidente electo por el pueblo y pusieron otro a dedo) en Grecia o en Italia.
Por todo ello, estas elecciones son extraordinariamente importantes. Pues debemos emplearlas en frenar al neoliberalismo. Si no lo hacemos, no valdrá con probar suerte dentro de otros cinco años, pues terminarán de imponer su modelo, y perderemos una oportunidad histórica. Una oportunidad perdida que supondrá más recortes, y menos democracia, hasta la aniquilación total del estado democrático y social. Si alguien cree que estoy siendo pesimista en exceso, es que realmente no ha vivido en este mundo los últimos años ¿Acaso no ha habido un enorme retroceso en derechos sociales y democráticos? ¿Qué nos esperará con otros 5 años de gobierno de Merkel y su troika? No nos la podemos jugar, porque no nos estamos jugando el presente, que es nuestro, nos estamos jugando el futuro, que pertenece a las generaciones siguientes.
Frente al modelo neoliberal de Merkel y la Troika, el modelo que defienden los conservadores y los socialdemócratas europeos, representados en España por PSOE, PP y UPyD, surge la alternativa del Partido de la Izquierda Europea. Una alternativa que nace espontáneamente en Grecia, el país que más ha sufrido los brutales ataques del neoliberalismo. La alternativa se llama Alexis Tsipras, un hombre que consiguió aglutinar a toda la izquierda griega bajo un nuevo partido, SYRIZA, y que se presentó a las elecciones generales en Grecia. La aparición de Tsipras supuso un verdadero revuelo entre las hordas neoliberales que, por primera vez en años, se sentían realmente asustadas, pues por fin existía una alternativa que podía devolverle al pueblo el poder robado por esos llamados mercados, que no son más que los especuladores financieros, los jefes de Angela Merkel. Los neoliberales trabajaron duramente para evitar la victoria de Tsipras, hasta el punto de llegar a la inédita situación de que todos los peces gordos europeos (Merkel, Draghi…) participaron activamente en la campaña electoral griega, intentando asustar a los posibles votantes de Tsipras. Consiguieron que Tsipras no ganara, pero quedó segundo por muy poca diferencia, un resultado muy bueno teniendo en cuenta la campaña tan brutal en su contra. Para más inri, todas las encuestas señalan que SYRIZA ganará las próximas elecciones generales en Grecia. La Troika puso toda la carne en el asador, pero solo pudo retrasar lo inevitable: su propia derrota a manos del pueblo griego al que tanto han maltratado. Derrota que espero que se repita en todos los demás países del sur, que hemos sido víctima, al igual que Grecia, de un golpe de estado moderno, no con guardias civiles en el congreso, sino con banqueros y especulación financiera.
Alexis Tsipras, candidato del PIE a presidente de la Comisión Europea
Es el momento de poner punto final a los ataques del neoliberalismo a la democracia y a los derechos sociales, llegó la hora de votar, pensando no en la gestión del sistema, sino en cual es el sistema que queremos: un sistema inhumano, antidemocrático, en el que los ciudadanos no sean más que mercancía en manos de oligarcas y banqueros, o un sistema profundamente democrático y que garantice los derechos sociales. Solo el pueblo defiende al pueblo. Llegó la hora de votar a favor de la esperanza que surgió en Grecia, el hombre que hizo temblar a Angela Merkel. El voto útil, el voto que defiende tus derechos, el voto que pide más democracia, es el voto a Alexis Tsipras, es el voto al Partido de la Izquierda Europea.
En España, el Partido de la Izquierda Europea está representado por Izquierda Plural, una coalición resultado del descontento social, las mareas, y las luchas en la calle, que han propiciado el encuentro en una misma candidatura de doce organizaciones, unidas para devolver el poder a la gente. Entre las 12 organizaciones que integran Izquierda Plural se incluyen Izquierda Unida (IU), Alternativa Socialista, Los Verdes, ANOVA o ICV.
Por eso, en estas elecciones, tú decides: ¿Democracia o Mercados? ¿Poder popular, o austericidio? ¿Merkel o Tsipras? Si apuestas por el cambio, en estas elecciones, tu opción es Izquierda Plural.