Siguiendo con el surf de saltos y malabarismos, os quiero presentar, para quienes no lo conozcáis, a uno de los surfistas que quizá más haya marcado en la evolución del surf del new age. Derek Bockelman. Un surfero alejado de lo establecido, rompiendo con las leyes de deslizamiento que imperaban en su época (y tampoco hace tanto de ello) y atreviéndose a mezclar, aún más si cabe, los dos deportes de su vida. El surf y el skate.
Así, verle surfear es como presenciar una competición de skate donde Bockelman siempre gana. Saltos, flips, kickflips, y todo lo que se le ocurra y más. Pero nada mejor que un vídeo como presentación.
Sin embargo, Derek no se quedó quieto en el mar haciendo virguerías, una vida demasiado fácil para él; y, una vez asentado su nombre en las vitrinas de los grandes en esta categoría, decidió poner en práctica su vena docente creando una escuela denominada waveskate donde la ola pierde la importancia para dar paso a un gran número de maniobras, aéreos y trucos propios del deporte de asfalto. Todo un lujo para la vista.
Matt Meola, Julian Wilson y, por qué no, Owen Wright (más calmadito desde que está en la WCT) son el resultado de su trabajo. Preparemos las tablas chavales, que dentro de poco sobraran olas de tanto volarlas.