Descansar en Pampa Linda

Por Pixel
On » lunes, 18 de marzo de 2013 // In » Bariloche '13 Durante el ascenso al Cerro Tronador en medio del pedrero tomamos la decisión de que ese sería el último gran esfuerzo. Ya hacía varios días que veníamos cargados y en la salida de frey una de las mochilas había sufrido un desgarro de la faja, cosa que obligaba a un esfuerzo sobrenatural. Dada esta decisión nos tomamos algún día de más en el refugio Otto Meiling y otros tanto en Pampa Linda.

La bajada del Tronador arrancó temprano 7:30hs, escapando de los tábanos. Poco menos de una hora nos llevó el pedrero y entramos a la sombra de los arboles para cuando el sol comenzaba a calentar. En el caracol hay varios atajos o caminos más cortos que van cruzando el sendero principal. Algunos están cerrados pero hay varios que se pueden tomar. A pesar de ser una senda muy tranquila y bien marcada, la recomendación de siempre, es que se mantengan juntos. Es muy fácil dividir el grupo si algunos van por un lado y otros por otro. A nosotros nos pasó de estar a pocos metros de distancia y prácticamente no escuchar nada del resto. Los arboles son conocidos como pantallas acústicas y en medio del bosque no hay para donde escapar. Antes del medio día estábamos descansando en Pampa Linda, buscando algún lugar donde armar la carpa bajo la sombra. Ya que por cuestiones varias no íbamos a seguir camino para Paso de las Nubes debíamos buscar algún entretenimiento para los siguientes días.
Al día siguiente salimos a pasar el día por el Ventisquero Negro y Garganta del Diablo. Siguiente la ruta que llega a Pampa Linda, a unos 7km se encuentran los balcones del Ventisquero Negro donde se puede dar una vuelta y ver el glaciar de lejos. Después de haber estado prácticamente sobre el Castaño Overo en el Tronador, verlo de lejos en la terraza no inspira mucho. Luego de dar una vuelta seguimos camino para la Garganta del Diablo. Por la misma ruta, son unos 1,5km más que hay que caminar hasta llegar al parador de la Garganta del Diablo.
Son recorridos muy tranquilos, que se disfrutan más que la llegada. Durante el camino hay un montón de lugares donde se puede parar a descansar un rato. Lo único es que durante un buen tramo del camino el sol pega con fuerza y no es muy recomendable beber el agua del Río Manso.
Nuevamente en Pampa Linda, otra de las opciones más tranquilas que se pueden realizar es ir al Saltillo Las Nalcas. Continuando por la misma ruta sentido oeste, a pocos metros se abre un camino a la izquierda muy bien indicado que llega directo al Saltillo. Antes de llegar cuando la senda se estrecha se pasa por un cartel el cual indica el sentido para llegar al Refugio Viejo del Tronador, por el cual es necesario pasar por la dependencia de Chile al hacer el cruce.
El saltillo es un lugar muy tranquilo y si hace calor hasta un buen lugar para refrescarse un poco. Se suele llenar de gente que va y viene para sacar fotos, lo mejor es ir temprano para estar tranquilo un rato y hasta llevar comida y pasar toda la tarde a la sombra.
Una tercera opción es ir al mirador del Castaño Overa camino al Refugio Otto Meilling, es un poco más largo pero con poco peso se hace muy fácil. La senda queda camino al Refugio se abre a la izquierda y se puede ver el glaciar desde abajo. A este último no pudimos ir pero luego de estar arriba no creo que nos hayamos perdido de mucho.
Ya que no seguimos camino para Puerto Blest (y por suerte no habías reservado el pasaje del catamaran), teníamos que tomarnos de vuelta un colectivo que nos llevara desde Pampa Linda y nos dejara en Bariloche.  Hay mucho movimiento de gente en esta época del año por lo que es recomendable reservar los pasajes de vuelta con tiempo ($80 si piden descuento por residente). El viaje dura unas 2 horas y sale a las 17hs de Pampa Linda. Como el camino se habilita a las 16hs para volver la caravana de vehículos volviendo puede ser intensa.