Sobran las palabras. Yo, como muchos de mi generación, aprendí a leer la belleza de la vida a través de la voz de Whitney Houston. Son muchos los sentimientos, alegres, tristes, que me acompañan con sus canciones, especialmente ésta: mi favorita.
Hoy me entristece su muerte. Una vez más el misterio de la vida: ¿cómo teniéndolo todo, cómo habiendo saboreado -estoy seguro- tanta belleza, fue arrastrada por lo que no llena el corazón?
Nunca te lo pude decir en persona, así que hoy aprovecho el rincón de este blog para darte las gracias. Seguro que desde el cielo estarás sorprendida de todo el bien que has hecho a tanta gente, entre los que me encuentro, por tu sensibilidad, tu corazón, esa prodigiosa voz y tu alma, grande. Descanses en paz.