Título original: Descender
Páginas: 144
Editorial: Océano Travesía
Descender es el título de una nueva y original saga de ciencia ficción dirigida a los jóvenes que toma la forma de una novela gráfica. Los autores, Jeff Lemire y Dustin Nguyen, han conseguido darle un nuevo giro a las constantes de este género, sin renunciar a algunos de los temas centrales de la narrativa fantacientífica. El primer libro de la serie se llama Estrellas de hojalata y narra la historia de Tim, un androide con aspecto de niño que despierta en una colonia minera situada en el planeta Dirishu 6. Tim ha permanecido una década desconectado y cuando vuelve a activarse se encuentra con que todos los habitantes del lugar han muerto tiempo atrás. ¿Qué ocurrió mientras él “dormía”? ¿Por qué no hay nadie? Sus indagaciones lo llevan a descubrir que una terrible masacre ha diezmado a los seres humanos.
Tim despierta en un mundo vacío, y sus recuerdos regresan poco a poco a él. Todos los humanos a los que ha servido, que lo han tratado como a uno más de ellos, están muertos. Sus restos están regados por el pequeño y desértico campo minero. Pero hay mucho más por lo que TIM-21 tendrá que preocuparse. Los chatarreros lo están buscando. Y otros más que necesitan algo que está oculto dentro de él. Ya que él podría ser una clave importante para un cambio aún mayor.
Éste es un cómic que ha tenido bastante aceptación y ya lleva 12 tomos en su idioma original (Inglés) y que Océano Travesía está recopilando en novelas gráficas. Y sólo puedo decir que me enamoré perdidamente.
Hablemos primero de lo más importante en una novela gráfica: el arte. Las ilustraciones son perfectas, simplemente perfectas. Con personajes y seres futuristas muy al estilo Star Trek o Star Wars, con seres humanos, robots y seres humanoides pero monstruosos. Las imágenes están coloreadas con lo que creo yo son acuarelas, ya que los colores son delicados. Al menos nunca me había tocado ver en una novela gráfica o un cómic unas ilustraciones con éste tipo de color y me fascinó.
Luego está la historia. Una historia que se me hizo bastante original. Ciencia ficción y robótica en su máxima expresión. Pero algo que disfruté mucho, es cómo el autor y el ilustrador, lograron darle personalidad a sus robots. Hay un robot que me fascinó que se llama "Taladrador" que es un robot enorme que no se considera muy inteligente y que odia a los humanos, pero que es un corazón con patas con el pequeño Tim cuando lo necesitó. Que un robot me robe el corazón no es fácil, sólo había pasado con R2D2 y BB8 de Star Wars, pero ahora me considero fan de Taladrador.
No sé mucho de ciencia ficción ya que he leído muy poco al respecto, aunque me considero fan de Star Wars y Star Trek como ya he mencionado sin parar en durante la reseña. Usualmente las historias de ciencia ficción escritas no me terminan de atrapar, como que mi imaginación no da mucho para imaginar robots o escenarios futuristas. Así que el hecho de que ésta historia fuera una novela gráfica me cayó de perlas, porque así como la historia me mantuvo pasando con ansias las páginas, las ilustraciones me ayudaron con mi falta de imaginación. Estaba embelesada y me acabé el librito en un par de minutos. Estaba en la misma habitación junto a mi papá, y me dijo que nunca me había oído hacer tantos ruidos y caras mientras leía, ya que o me reía un poquito o me sorprendía con algún suceso que no me esperaba.
Definitivamente lo recomiendo, es más, dejen todo lo que están haciendo y vayan a comprar la novela, la van a amar, y si no, al menos tendrán una obra de arte en su librero, porque nadie podrá negar que el arte visual de la novela es INCREÍBLE, nunca había visto nada igual. Puedo pasarme dos horas repitiendo alabanzas sobre el libro que sólo lograrán aburrirles, éste es de esos sucesos en los que uno tiene que comprobar por sí mismos la genialidad del producto. Siento que estoy fangirleando demasiado, pero no estoy exagerando, realmente me enamoré de ésta novela.