Encuentra tu pareja ideal según tu signo del zoodiaco
Los signos se dividen en cuatro grandes grupos que se corresponden con las energías de los cuatro elementos: agua, tierra, aire y fuego. En función de eso posee ciertas características y son compatibles o no con los otros signos.
Los signos de agua son piscis, escorpio y cáncer. A ellos les gusta proteger y ser protegidos, pero escapan de las personas dominantes. No suelen expresar abiertamente sus sentimientos, ya sea por timidez o temor, y suelen ser soñadores e imaginativos. Tienen mucha sensibilidad y tendencia a retraerse en si mismos. Son emocionales e intuitivos.
Tauro, virgo y capricornio son los signos de tierra. Muy trabajadores, tienden a proteger y querer conservar aquello que tienen y que han conseguido con esfuerzo, esto a veces los hace excesivamente materialistas. Son sumamente responsables y meditan mucho antes de hacer algo, y una vez decidido son constantes y trabajadores. Siempre optan por lo práctico y mantienen pensamientos realistas y conservadores.
Representando al aire están géminis, libra y acuario. La comunicación es su fuerte y gustan mucho de debatir. Siempre planifican y proyectan su vida, aunque muchas veces les cuesta cumplir el objetivo. Eminentemente analíticos, gustan de razonar y buscan compatibilidad intelectual en quienes lo rodean.
Finalmente, aries, leo y sagitario son los signos de fuego. Confían en si mismos y se hacen notar, lo que los convierte en líderes natos. Tienen vitalidad, impulsividad y pasión, esto los hace ser impetuosos, dominantes y optimistas. Siempre son muy sinceros. Lo negativo es que pueden caer en el orgullo, la impaciencia y, en ciertos casos, en la violencia y los excesos.
Ahora que has ubicado tu signo con su elemento y conoces sus características, podrás aprender como te relacionas con los demás.
El fuego con el agua no es una relación fácil, en la naturaleza también son elementos que no conjugan bien. Pero con trabajo y esfuerzo se podría llevar adelante la relación. El problema es que el fuego es muy impetuoso y el agua muy sensible, lo que genera conflictos y malos entendidos. A pesar de que el agua puede apagar el fuego y el vapor se interpretaría como un momento de relax, también puede tornarse asfixiante.
Por otro lado, el fuego con el aire siente más vitalidad y hay una mayor y mejor conexión que con el otro elemento. Sin embargo, el fuego debe entender que al aire le gusta ser libre y no intentar dominarle ni ejercer el control. Lo positivo es que, como es sabido, el fuego necesita del aire para vivir y existir, por lo que la llama de la pasión estará siempre encendida.
Con la tierra, el fuego sentirá una fuerte y rápida pasión, pero los problemas aparecerán luego. Es que si bien el fuego calienta a la tierra con las llamas de la pasión, a la vez que esta ofrece el soporte y la estabilidad, puede suceder que finalmente este la queme y le quite su vitalidad. Hay que tener mucho cuidado y saber contener las llamas.
Por otro lado, el agua y la tierra son compatible igual que en el mundo real. La tierra, con su estabilidad y confianza, complementa a la sensible, inestable y emocional agua.
Al contrario, agua y aire no son la mejor mezcla. De hecho, en la naturaleza cuando se combinan crean desastres naturales como tormentas, tsunamis y tornados. Para que dos signos de este tipo estén juntos, deben saber que tendrán que luchar para que los problemas no se salgan de control.
Finalmente, la tierra y el aire tendrán una relación algo inestable porque el aire puede soplar con calidez y amor, o al contrario traer un frío glacial. Será tarea de la tierra llevar adelante la relación y darle un sostén.
¿Qué pasa si comparten elemento?
Seguro que esta pregunta vino a tu cabeza. Pues eso denota que puede haber complementación entre las partes. Además, podrán ayudarse mutuamente al mirar el mundo de igual manera y tender hacia el “mismo lado”. Sin embargo, al ser las mismas debilidades y fortalezas puede haber una suerte de monotonía o de falta en la relación.
Si las dos personas son de fuego seguramente tendrán una relación muy apasionada y se impulsaran mutuamente para lograr las metas personales. Pero si son de aire, esta libertad será absoluta, aunque se divertirán mucho juntos porque tendrán buena comunicación y confianza.
Cuando ambos son de tierra la rutina no será un problema porque a ambos les gusta la estabilidad y la armonía. Por último, si son de agua las identidades tenderán a fundirse y la complementación mutua será muy profunda.
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