A los dos años de iniciarse la crisis económica, muchos países siguen presentando altas tasas de desempleo. Según estimaciones de la OIT, el número de parados a nivel mundial ha aumentado más de 30 millones desde 2007. Al mismo tiempo, apenas hay indicios de que esta situación pueda mejorar en un futuro próximo.
Según la OIT, durante la próxima década se necesitarán alrededor de 440 millones de nuevos puestos de trabajo para los recién incorporados al mercado laboral, y un número aún mayor de puestos de trabajo para combatir el desempleo generado por la crisis.
Por su parte el FMI indica que recuperar la demanda agregada es una de las mejores formas de reducir el paro. Al mismo tiempo, según la institución financiera, como estrategia general, la mayoría de los países desarrollados no deberían endurecer su política tributaria y presupuestaria, ya que eso podría arruinar la recuperación económica.Una mirada no convencional al neoliberalismo y la globalización