Desgraciadamente esta también es mi andalucía

Publicado el 29 abril 2014 por Catalega @Catalega
El domingo tuve la oportunidad de participar, de nuevo, en el programa La Marimorena, dirigido y presentado por Carlos Cuesta y que todos los domingos, a partir de las 21:30 horas se emite en el canal 13 TV. Ya conté mi primera experiencia hace unas semanas en el Blog. De esta he de destacar haber podido conocer a primeras espadas como Carmen Tomás e Isabel San Sebastián, y en especial a Asís Timermans, todo un caballero.
En esta ocasión me invitaron para hablar sobre la polémica surgida en torno a la gestión de los cursos de formación en Andalucía. Algo que ya hemos tratado en Desde el Caballo de las Tendillas en varias ocasiones y, en especial, en el post titulado “El negocio del paro”.  En una de mis intervenciones hice referencia a este artículo y comenté que en Andalucía mucha gente vive del paro, sindicatos, empresarios, incluso algunos parados y, por supuesto la propia Junta de Andalucía. Ante esta afirmación, la gran periodista Mari Pau Domínguez, otra primera espada, me contestó diciendo que cómo podía decir eso de los parados, que los parados no podían vivir ni mantenerse con las actuales prestaciones de los 400 euros, por ejemplo. Ahí tuvimos un pequeño rifirrafe, fue mi primera discusión televisiva, por lo que ya no olvidaré a la Sra. Domínguez.
El caso es que me he de ratificar en lo que dije, en Andalucía hay mucha gente que vive del paro, incluso parados, que han hecho del paro, el PER (actualmente PROFEA), las becas de estudio y otras ayudas y prestaciones su forma de vida. No seré yo el que diga que están felices y contentos viviendo así, pero si diré que viven y que muchos de ellos se dejan llevar por esta situación, sin buscar otro medio de vida, sin buscar un trabajo estable.
Y ejemplos hay muchos, y pondré uno que viví de cerca puesto que mi padre fue el protagonista. Mi padre era maestro y hace años estuvo en un colegio de Almodóvar del Río, bonita localidad cordobesa regada por el Guadalquivir y conocida por su espectacular castillo. Mi padre se preocupó por un alumno que era brillante, que podría haber estudiado lo que hubiera querido, habló con él y con su familia para que siguiera formándose tras la EGB, el caso es que en una de estas conversaciones el chico le preguntó a mi padre que cuanto ganaba al mes, mi padre se lo dijo y el chaval se echó a reír, resulta que en su casa ingresaban entre sus padres y hermanos mucho más dinero al mes, entre el desempleo, el PER, las chapuzas, las becas y demás, este joven le preguntó ¿para qué voy a estudiar si en casa se gana más que usted que ha estudiado? Ahí acabó la insistencia de mi padre. Y otro ejemplo que también es cercano a mi familia, mis suegros viven en Écija y tienen un pequeño terreno, compartido con otros familiares, en una aldea de Fuente Palmera, en aquella zona muchas personas cobran del PER sin haber hecho las peonadas, y en mi cara, a mi suegra, medio le han llamado tonta por no hacer lo mismo. Y podría seguir…
Esta es la realidad de Andalucía, una tierra donde el Partido Popular gobierna en las principales ciudades, pero en la que la izquierda recibe los votos de los pueblos, de la Andalucía profunda, la que, desgraciadamente, vive de esta forma. Y sé que no se debe generalizar y que hay gente que lo está pasando muy mal con esta crisis, y hay que ayudarla para que vivan con dignidad. Pero también es verdad que muchas familias se han acomodado a vivir del sistema, de las ayudas, las subvenciones y las becas.
Ojalá cambie la situación, aunque lo dudo, porque en más de 30 años de gobiernos socialistas, y los que me temo que quedan, a nuestros dirigentes no les ha interesado que esto cambie, al revés, ha ido a peor. Desgraciadamente esta también es mi Andalucía.