Deshielo y ascensión, de Álvaro Crotina Urdampilleta

Publicado el 05 marzo 2014 por Aramys

¨Abrí los ojos con el delirio encima. Me sacudí las manos como si fueran dos manoplas infecciosas. En este desabrido amanecer que relato, me poseyó la insospechada amenaza de ser una prolongación de aquel enjambre. Me saqué (berreando) los guantes esperando ver mis dedos convertidos en queso agujereado o fruta podrida. Veía (antes de ver) minúsculos e innumerables agujeritos plagando toda la superficie de mi epidermis. No vi nada. Con brusquedad, me desabroché el traje y quise ver el pecho (que también esperaba roído y acolmenado), pero era la pesadilla, sólo la pesadilla.¨

Lo quise desde que lo vi. No recuerdo donde. Pero cuando me crucé con esa magnífica cubierta se me encendió la alarma. El deseo. La contraportada. El miedo. El deseo.

Me lo imagine difícil, denso, críptico. Pero lo quería. Sin referencias, en una editorial pequeña y al parecer con una trama extraña, ¨una novela irrealista polar ártica¨. Leí una reseña. Dos.

Y me lancé al vacío. Pasando por caja. Ay.

¨Pero Dios estaba ahí, terrible, ajeno, sanguinario, cruel, benévolo, monstruoso, bello y reflejado. Y yo comencé a adorarlo, en aquellas sangres en aquella naturaleza exaltada. No era oro, no era plata, no era piedra: era la sangre, era el mar, era el sol.¨

Tengo. Tenía que aprender a leer. Joyce me dio una buena lección al respecto y me enseño a frenar en seco, a leer, a prestar atención, a concentrarme. Soy un tío disperso. Hay novelas que te recuerdan la necesidad de prestar atención, que te abofetean como una madre para que estés atento. Deshielo y ascensión quiere que estés por ella, es una relación quid pro quo, aunque sin exigencias, tú me quieres y yo te quiero, té me das y yo te doy mucho más, yo te lo doy todo y tú me das un poco, estoy aquí para ti, solo y exclusivamente para ti.

Tengo la sensación de que se ha formado un aura de dificilismo en torno a ésta novela, que la gente no le presta atención porque la temen. Esas cosas pasan. Ahora es cuando os digo que eso son chorradas. Y que es una novela de género. Una-novela-de-género-oh-Dios-mío.

Deshielo y ascensión es sobre todo poder narrativo, fuerza, estilo desmesurado, poderío. Realmente no importa mucho, porque te envuelve y te transporta de tal manera que uno se deja llevar te cuente lo que te cuente. Es como ir encima de una balsa sobre una enorme y desmesurada superficie de agua. Rio, mar, océano, no importa, importa que navegamos, nos movemos, avanzamos.

Dividida en cuatro partes bien marcadas, bien distintas, (Deshielo 1-Hommstadt 2- La base de Furth/Isoko Lithium 300 y Ascensión 1-Sitka 2- Abadía de Isenheim) Deshielo y ascensión orbita entre la ciencia ficción, el terror gótico, la novela polar de aventuras, la narración biográfica pura y lo que se os ocurra. Porque como digo, da lo mismo.

Álvaro Cortina es un genio, un auténtico experto en esto de narrar, de crear ambientes, personajes. Las cuatro partes o cuatro relatos en que se divide la novela son prácticamente independientes, cada uno cuenta una historia, cada uno tiene su voz que viene dada por el protagonista; más pausada, mas autoritaria, mas alucinada, en eso Cortina está superior, en serio, son brutales los cambios de registro. Hiladas las cuatro partes por un pequeño suceso o por un personaje que, del anterior relato nos acompaña, como un residuo que nos recuerda lo anterior, pasamos de escenario casi sin darnos cuenta, nos despegamos con cuidado y nos vamos adentrando en el siguiente relato con delicadeza, con una exquisitez abrumadora.

¨La piel negra, muy negra. Y tentáculos que se extendían, si vida, por debajo de donde la gente tiene la cintura.¨

Deshielo y ascensión tiene mucho de apocalíptica, de novela de personajes perdidos, de fatalidades. Los cuatro personajes que protagonizan las historias, en mayor o menor medida son personas perdidas, con destinos fatales, con vidas oscuras, vidas vacías, mentes sombrías, que, mediante sus actos, algunos voluntarios y algunos involuntarios, predestinados, se ven abocados a grandes desgracias, a fines extraños o absurdos, a existencias penosas para el resto de sus días. Paisaje extremo, actos extremos.

Deshielo 1-Hommstadt

Este relato o primera parte es absolutamente turbador, recuerda a Lovecraft de una manera increíble, por los escenarios, por el miedo de nuestro protagonista, por los sucesos que se dan, por la ambientación, por lo exquisito del miedo que pasamos. Dos cazadores están un una cabaña en medio de la tundra blanca, en algún lugar muy alejado de todo. Cubiertos de nieve, con frío extremo. Tienen órdenes de no salir nunca, bajo ningún concepto de la cabaña. Pero claro, el ser humano, lo de hacer caso a las reglas no lo lleva muy bien. Es este un relato con aire de terror gótico, de novela polar, con un poco de ciencia ficción, con seres extraños, aventura, alucinación, un relato brutal e hipnótico, narrado de manera magnífica desde la perspectiva alucinatoria y sobrecogedora del protagonista.

Deshielo 2- La base de Furth/Isoko Lithium-3000

De la mano de uno de los protagonistas del primer relato, pasamos a esta segunda aventura. Aquí conservamos un vínculo muy marcado y vivo con el primer relato, un vínculo que se conserva hasta el final. Pero el escenario y el protagonista cambian. Estamos en la base polar de operaciones de una multinacional que hace prospecciones en la zona; unos cuantos contenedores en medio de la nada (no muy lejos de la cabaña de los cazadores). Ahí tenemos al ingeniero jefe, que es nuestro protagonista, un hombre altanero, serio, creído, mandón, melómano. Un hombre excesivamente trabajador, obsesionado por la educación de sus hijos (que viven en la base con él y su mujer), a los que él mismo imparte la formación, que el mismo ha diseñado y de la que está realmente orgulloso. Un relato con partes educacionales y con un gran relato de aventura en el mismo que es un claro homenaje a las novelas de aventuras polares, de descubridores, a Jules Verne, un relato que tiene de todo, que te hace vibrar y disfrutar y también, pasar un poco de miedo y asfixia. Y que está narrado con la voz del ingeniero que es autoritaria, altanera, distante y fría.

Ascensión 1-Sitka

El relato más largo, el que hay que tomarse con un poco más de calma. Mucho arte, una mezcla de sumisión y de amor, de locura de artista. Protagonizado, de nuevo, por un personaje que viene del capítulo anterior y que nos traslada a Sikta, la única ciudad en medio de la tundra blanca. Un capítulo que va de menos a más, donde las acciones van in crescendo hasta un final bastante épico y apoteósico. Este relato es de carácter biográfico, una mujer nos relata la vida de un pintor, su pasado, su presente, su vida con él, como digo es más lento, pero no es farragoso ni pesado, tiene ritmo y suceden cosas…que nos llevan al cuarto y último relato. Este relato está narrado con admiración, sobre todo al principio, luego con cierto desencanto, para pasar al miedo y al desconcierto al final…

Ascensión 2- La abadía de Isenheim

En el último relato parece que Cortina se ha guardado todo el género condensado, toda la acción pura, toda la diversión. Esta última historia es de ciencia ficción pura y dura, la acción se sitúa en una abadía sita en el espacio, orbitando cerca del sol. Allí unos simpáticos monjes pasan sus días rezando y reflexionando. El protagonista de nuestro relato ha sido contratado para ir a la abadía a recuperar un objeto, pero al llegar allí…las cosas se tuercen y se precipitan. La abadía de Isenheim es un relato que se lee de una sentada, con la sensación de vértigo que dan los anteriores relatos, con la sensación de cerrar el círculo de cuatro vidas, de cuatro historias, con la admiración del imaginativo que tiene Cortina, un relato redondo para cerrar una novela increíble. Soprende La voz narrativa de éste relato, que a diferencia de los otros tres, es mucho más seca, más telegráfica, frases cortas, puntuación abundante, dureza.

¨También vi una especia de arañas delgadísimas, grandes como terneros, que andaban por los fértiles fondos de las hectáreas de inmenso acuario, como un gran valle sin viento.¨

Llama la atención como Cortina juega con los espacios. Los dos primeros relatos, Deshielo, están ambientados en grandes espacios abiertos, tundras blancas, lo desconocido, la inmensidad, los viajes, espacios donde sus personajes se enfrentan a cosas desconocidas, seres extraños, o a ellos mismos. En la segunda parte, los dos siguientes relatos, Ascensión, en contraposición, la acción sucede en espacios cerrados, casas, naves espaciales, estaciones en el espacio, abadías (que aunque increíblemente grandes son un espacio cerrado y opresivo), pero los enemigos siguen siendo extraños, desconocidos. Espacios diferentes, contrapuestos, pero los mismos miedos. Aún con esas diferencias territoriales, Cortina imprime todos sus espacios de un ambiente asfixiante y oscuro, como…de locura.

Podría seguir sacando matices a esta novela, exprimiéndola, pero creo que nadie va a leer tanto, y mi admiración por ella creo que ya ha quedado clara. Deshielo no es una novela filosófica, ni es una novela new age, no es un invento ni un experimento de metaliteratura, no es un texto indescifrable, soso, farragoso y altanero. Deshielo y ascensión es solo una novela de una calidad excepcional, excelsa, original, apabullante. Una novela de narración y ambientes oníricos, brutales, fascinantes. Una novela con ecos de Poe, Lovecraft, Verne, Wells y con un mundo imaginado arrollador.

Deshielo y ascensión

Álvaro Cortina Urdampilleta

Jekyll and Jill editores 2013

326 páginas.