El desfile escogió el concepto “Rainbow” y, precisamente, la nota de color para abrirlo fue un arcoiris interpretado por la alegría de cinco niños.
La colección promete el nacimiento de algo bueno, rebosa felicidad. Es un mensaje grabado en el inconsciente colectivo y, a la vez, apela a nuestra parte más individual, porque expresa diferencia. Todos podemos verlo, pero cada uno lo ve a su manera; no hay dos perspectivas iguales. Como las personas, cada arcoíris es único. Expresa libertad, nos invita a salir al exterior, a respirar aire fresco y a sentir cómo el viento nos acaricia la cara. Nos enseña a cultivar la confianza y la esperanza. Me parece un mensaje fantástico que nos da esta marca cuyo espíritu estalla en mil colores. Mi hijo viste Desigual cada vez más.
Desigual se caracteriza por sus diseños diferenciados, optimistas y llenos de color. Por eso es una marca muy afín a mi personalidad. La firma inició su actividad bajo el lema ‘Desigual, no es lo mismo’ en 1984. En los últimos años la compañía ha registrado un crecimiento superior al 50% anual y cuenta actualmente con una plantilla formada por más de 3.500 personas de 83 nacionalidades distintas.