Al pan, pan y al vino, vino
Eso más o menos es lo que han debido pensar los de Desigual en su último anuncio en el que una chica (igual que podía haber sido un chico, que ya vale con los mentecatos sexistas y absurdos a final de 2012) se va probando ropa mientras piensa en alto cómo se va a tirar a un compañero de la oficina.
Ni más ni menos.
Sin tonterías, pero los de Desigual han conseguido un spot que con toda la seguridad va a tener un buen puñado de visitas (y seguramente también de críticas) a su spot/campaña más reciente.
Es un poco parecido a lo que hablamos en una ocasión, con la teoría de que "el sexo vende", o que es bueno que hablen de ti, aunque sea mal.
Desde aquí, mi enhorabuena porque han conseguido un buen spot donde además cumple su cometido de enseñar muchísima ropa de su colección... y además han hecho bastante ruido con su último spot y su campaña twittera de #tengounplan
(por cierto, gracias Tuñet por la info)