La semana pasada no avancé mucho con mis lecturas, así que la situación está sin muchos cambios. La única novedad es que empecé a leer Jane Eyre de Charlotte Brontë y me ha cautivado desde las primeras páginas. Pero ahora mismo, la tengo parada al igual que La gitanilla de Cervantes. La razón es que he de acabar Une pièce montée de Blandine Le Callet para el Attelier Littéraire de la clase de mañana.
Y no tengo mucho más que contar. Me hubiera gustado explicaros como fue la visita de Pierre Lemaitre en "La Semana Negra de Barcelona", pero el miércoles el resfriado-gripe me tumbó, y al salir del trabajo me fui directa a casa. No soy muy mitómana, pero como toda la clase de francés íbamos juntos al evento, se me contagió el entusiasmo por un autógrafo del escritor y tenía preparada su novela Alex para tal ocasión, pero nada, otra vez será.
Espero que paséis muy buena semana y nos vamos leyendo.