Después de 24 años, Argentina vuelve a una final mundialista

Maxi Rodríguez se encargó de anotar el último tanto de penal que le daría el pase a la tan esperada final

¡Finalistas! Después de un partido cerradísimo e intenso desde lo táctico, Sergio Romero fue el héroe argentino en la tanda de penales y el domingo ante Alemania definirá la Copa.

Argentina es finalista de la Copa del Mundo. Con sufrimiento, sudor, lágrimas, con Javier Mascherano tan grande como Brasil y las manos de Sergio Romero como héroe atajando dos penales, empató 0 a 0 con Holanda y se impuso por 3-1 en la definición por penales después de 120 minutos no aptos para cardíacos.

Ese partido de ajedrez que se esperaba en la previa del encuentro se cumplió a rajatabla en los primeros 45 minutos. Los holandeses decidieron esperar en su campo y resignar la posesión, incluso con una línea de seis defensores para cubrir hombre por hombre. Y el equipo albiceleste, que hacía rotar la pelota, buscaba los espacios por los costados con Lavezzi y Pérez, ya que Messi estaba siempre cubierto.

Hubo que esperar un cuarto de hora para la primera situación peligrosa, cuando Sneijder encontró un mal despeje de Mascherano y remató desviado. La respuesta fue un tiro libre de la Pulga que Cillessen contuvo bien. Los de Sabella crecieron en cuanto a la actitud pero sin llevarse por delante el encuentro, cuidadosos de no dar espacios para los contragolpes veloces.

La pelota parada, que pintaba para un arma importante, solo pudo ser aprovechada con un cabezazo de Garay que se fue muy alto. Otra vez volvió el estudio, ante las coberturas para Messi de un lado y para Robben del otro. Recién sobre el final el 10 pudo girar para que Marcos Rojo se vaya por izquierda y busque a Higuaín, pero con un centro demasiado largo.

Decididamente buena la tarea Argentina en la primera parte desde lo táctico, paciente y sabiendo que una fisura puede costar caro. Pero lo mismo podría decirse de Holanda, que apostó a resignar protagonismo pero no permitir jugadas claras en el ataque.

La segunda etapa pareció comenzar con otra postura de los europeos, que tomaron la pelota y dejaron el sistema de espera en su campo. Un tiro libre alto de Sneijder fue la primera aproximación, luego de una falta de Demichelis a Robben. De la mano de Biglia como eje en el medio, Argentina logró reacomodarse y el Pipita Higuaín tuvo su oportunidad tras un centro de Lavezzi desde la derecha, pero no pudo conectar de cabeza.

Ya promediaba la segunda parte cuando los neerlandeses se adueñaron de la pelota pero con mucho pase lateral y poca profundidad, tanto que Romero continuaba como un espectador en su arco. Nuevamente el equipo albiceleste recuperó la iniciativa con mayor intensidad y Lavezzi supo recortar de izquierda al medio, pero a la hora del remate se encontró con una barrera naranja.

A los 30 llegó la situación más clara para los argentinos, con un gran centro de Pérez que anticipó Higuaín y dio en la parte externa de la red. Decidido a ganarlo, Sabella mandó a la cancha a Palacio y a Agüero, justamente en reemplazo de los protagonistas de la situación anterior. 

Cumplido el tiempo reglamentario, Robben encontró el espacio por primera vez en toda la noche de Sao Paulo, pero cuando estaba por definir ante Romero apareció la pierna salvadora de Mascherano para interponerse en el camino y enviarla afuera. Así se fueron los 90 minutos, sin diferencias entre sí luego de un duelo extremadamente táctico.

Ya en el primer tiempo suplementario era todo de Holanda, que se aprovechó de un equipo argentino estático y con poca sorpresa, como a la espera del contragolpe. Robben quiso sorprender con su jugada hacia adentro y latigazo a la carrera, pero Romero estaba bien ubicado. Argentina logró salir del asedio y sobre el final tuvo un centro de Palacio, que el Kun no llegó a desviar.

La segunda parte se jugó con el resto físico de unos y otros, con posesiones cortas e imprecisas. Depay quiso probar de afuera, pero se fue abriendo la pelota hasta terminar muy lejos. Y tras un gran pase de Maxi Rodríguez, Palacio quedó frente a Cillessen, eligió cabecer por arriba y no tuvo fuerzas. Maxi también tuvo su chance cuando Messi se escapó por la izquierda, sin embargo su volea fue sin potencia y a la mano del arquero.

Los penales encontraron a Sergio Romero como héroe, tras atajarle sus disparos a Vlaar y a Sneijder. y Argentina no falló, convirtieron Messi, Garay, Agüero y Rodríguez, para volver a una final de la Copa del Mundo después de 24 años y definirá el domingo con Alemania en el Maracaná en busca de su tercer título.

Fuente: http://www.goal.com/