Estos días también me estoy planteando que será de mí después del examen...
Sé que cuando salga de la universidad me iré a comer con mi madre y de compras por el centro de Madrid, pero después, cuando ya esté publicada con la hoja de respuestas provisionales a las pocas horas de estar publicada y me vea con 24 fallos o que he tenido pocos fallos y por lo tanto paso al segundo examen o que este más o menos en la nota de corte y no sepa que hacer, si coger a un preparador para el siguiente ejercicio o no hacer nada porque no me quiera dejar la pasta porque no me vale para este año o que hacer.
Me pone muy nerviosa pensar en el momento en el que reúna la valentía suficiente para sentarme con el portátil y la hoja rellena que me darán el día del examen y corrigiendo mis fallos en la página del INAP. Hay gente que se lo va a pedir a sus maridos o a su familia para que se lo corrijan, pero eso no quiero hacerlo, quiero verlo por mi misma y en la soledad de mi casa.
Después del examen tendré que poner mi vida un poco en cauce, sé que si suspendo no voy a abandonar, el próximo año me lo saco fijo, porque me sabré las leyes mejor de lo que ya me las sé ahora e iré más curtida al examen, ahora como me pilla de nuevas no sé como estaré, ni lo que sentiré.
Supongo que estas líneas las escribo desde el miedo que tengo a después de tanto tiempo dándolo todo, hacer un examen de pena que tenga fallos hasta en mi nombre...