Hearts, Hibernian, Rangers... No, no es el cartel de la próxima temporada de la Scottish Premiership. Aunque parezca mentira, estos tres históricos del fútbol escocés pelearán este año por una plaza de ascenso directo -y otra de Promoción- en la Scottish Championship, su segunda división. Jamás se ha visto una combinación de equipos de esta talla en la categoría de plata, pero lo mejor de todo, lo que la hace más sorprendente, son los trofeos de Liga que suman entre ellos. 72 títulos acumulan los equipos de la Scottish Championship: Rangers (54), Hearts (4), Hibernian (4) y Dumbarton (2); mientras que en la Scottish Premiership la cifra es menor y más repartida: Celtic, Aberdeen, Motherwell, Kilmarnock, Dundee United y Dundee FC, suman entre todos 53 entorchados. Una cifra que empobrece aún más la competitividad del campeonato.
¿Por qué descendieron Hearts y Rangers?
El club de Glasgow fue el primer grande en bajar por problemas económicos. Su deuda rondaba los 22 millones de libras y en Febrero de 2012 la SPFL declaraba que el club estaba en bancarrota. Días después, se anunció que el Rangers entraba en Administración y que no podían acudir al mercado de fichajes -si podían fichar agentes libres-. Al final, el máximo mandatario se fue, el club fue renombrado como The Rangers y descendieron a la Cuarta División. Han pasado dos años ya de aquello, pero la hinchada no se rinde y cada fin de semana llenan el Ibrox Stadium. Sea cual sea la división y el rival. Además de hinchada, el Rangers sigue siendo el club que más títulos ha ganado y el más laureado de Escocia -en lo doméstico-. Sin embargo, todo no es tan negativo como parece, y es que en estos últimos dos años, ha contado con jugadores de renombre en sus filas como Mohsni, Zaliukas y Lee McCulloch, y para esta temporada se sumará uno de los mejores goleadores escoceses del momento, Kris Boyd.
En el Hearts se seguirán acordando del nombre de Vladimir Romanov durante varias décadas. El multimillonario ruso llevó a la ruina a un club que vio como la temporada pasada sufría la entrada en administración y la sanción de 15 puntos al principio de campeonato. Su deuda ha crecido considerablemente con el paso de los años. A principios de 2005 no pasaba de los 7 millones de libras, hoy en día se dice que ha aumentado hasta los 20. La temporada pasada se deshizo del 90% de su plantilla, llegando a jugar con chicos juveniles. Parece que tardarán en volver, en juntar todas las piezas y montar un gran equipo. Lo único que tenemos claro es que seguirá acogiendo una media de 16.000 aficionados en las gradas del Tybecastle Stadium esta temporada y que en la Scottish Cup seguirán dando guerra a Celtic y Rangers.
Hibernian, Dumbarton, y cómo volver a la élite.
Las historias de estos equipos son económicamente menos trágicas y solo se le pone una pega, lo deportivo. Ambos conjuntos han visto como su situación empeoraba con el paso de los años, vendiendo a sus mejores jugadores y fichando francamente mal. El último caso es el del Hibernian, que llegó a liderar en 2012 la Scottish Premiership durante varias jornadas y el pasado verano logró clasificarse para las rondas previas de la Europa League. Su mercado estival no fue bueno y no consiguieron jugadores de garantías que sustituyeran a Leigh Griffiths y Jorge Claros, dos hombres que se convirtieron en estrellas del Easter Road en su primera temporada. En el Dumbarton llevan sin ver fútbol de gran nivel desde 1985, último año que jugaron en Primera División.
Por si fuera poco, los continuos problemas económicos que arrastran los clubes escoceses, los pocos patrocinadores con los que cuenta la SPFL y la exportación de las jóvenes promesas a campeonatos mucho más competentes, engrandece aún más los problemas del actual modelo de competición escocés.
Por Miguel Ríos, @MiguelRivers96 en twiter