Los científicos también tiene algo que ver y existen estudios de estos homínidos que se nos presentan como un eslabón perdido de un mono gigante que vivió hace más 300.000 años. Uno pelo albino que se esconde a miles de kilómetros de altitud en las montañas y otro de pelo marronaceo que hace lo propio en bosques frondosos en la otra punta del planeta.
Como siempre expondremos pros y contras sobre su existencia y cada cual pueda sacar sus propias conclusiones. ¿Y tú, querid@ lector/a qué opinas sobre su existencia? ¿Creemos en las historias y leyendas de nuestros ancestros o es un negocio lucrativo que intenta llevar a gente a diferentes lugares?
1. ORIGEN
GIGANTOPITHECUS BLACKI
Gustav Heinrich Ralph von Koenigswald fue un paleontólogo holandés que se unió al Servicio de Reconocimiento Geológico de las Islas OrientalesNeerlandesas a finales de 1930 siendo su sede base en la Isla de Java.
En 1935, mientras estaba de viaje en Hong Kong encontró en una farmacia china dos terceros molares inferiores de un animal de gran tamaño que los dueños habían confundido con “huesos de dragón”, fósiles óseos que molían para ser empleados en enfermedades como el paludismo. Los estudios realizados derivaron en una criatura homínida de gran tamaño a la que denominaron Gigantopithecus blacki, la primera palabra proviene del griego “Mono gigante” (de la familia de los Ponginae, Pongos, tenía una altura de 2,70 metros y más de 270 kilogramos) y la segunda en honor al paleantropólogo canadiense Davidson Black que había fallecido un año antes de dicho descubrimiento.
Muchos creen que si el Bigfoot de verdad existiese, sería un descendiente directo de esta especie que vivió hace 300.000 años, pero aquí viene la gran duda: ¿cómo ha evolucionado este tipo de homínido gigante en la Tierra desde entonces hasta 1830 que tuvo su supuesto primer avistamiento por un humano sin que en ese intervalo de tiempo no nos enterásemos?
2. ¿EL YETI Y BIGFOOT SON LO MISMO O DISTINTOS CRÍPTIDOS?
¿MISMO ANIMAL O DIFERENTES?
Tras haberlo “visto” crearon su historia: un ser sobrenatural que fue enviado por los dioses para guardar y proteger a las criaturas de la montaña. Esto se mezcló con una historia del folclore Sherpa que hablaba de un gorila albino con andar bípedo que va dejando huellas por cada lugar que pasa.
Por otro lado el Sasquatch es otro animal críptido (animales ocultos que podrían existir y que estudia la criptozoología) y homínido que tiene bastantes similitudes con el yeti. Es bípedo, vive en los bosques y montañas, procura esconderse del humano, tiene una altura considerable, está cubierto de pelo y segúnlos testimonios también descendería del Gigantopithecus blacki, pero en vez de encontrarse su origen enAsia, sino en Norteamérica (Alaska y EE.UU.) y su nombre proviene de un antiguolenguaje indígena llamado halkomelem, y en antiguas leyendas hablan que atacaba a los poblados de noche y se llevaba a los niños. El nombre de Bigfoot se lo pusieron después debido a un error, la foto de esa huella de pie era del Yeti y los estadounidenses acuñaron el nombre para el que sus ancestros llamaron Sasquatch cuando empezaron a salir los rumores de avistamientos.
Si no son la misma criatura, podríamos decir que son primos-hermanos o parientes muy cercanos, pero aunque sean estos los más conocidos, la misma criatura tiene diferentes nombres en otras partes del mundo como Yeren en China (Yeh-Ren, Hombre salvaje), Hibagon o Hinagon en Japón, Yowie en Australia (Yowie-Bhowie, palabra aborigen para referirse a un animal con apariencia humana), Migoi en el Tíbet (hombre salvaje) o Basajun/Baxajun en el País Vasco (en Euskera señor de los bosques)... Demasiados nombres para un animal muy parecido de diferentes lugares y culturas, más de veinte países afirman haberlo visto. Y aquí esta el leiv motiv que persigue todas las entradas de esta sección : ¿cómo diferentes culturas, algunas sin ninguna conexión durante muchos siglos, puedan tener entre sus mitos a una misma criatura?
3. LOS PRINCIPALES AVISTAMIENTOS
Algunos monasterios nepalíes conservan supuestos restos de dicho animal, pero en realidad se han probado que son huesos y pelos de animales y no tienen nada que ver con un supuesto homínido. Charlotte Lindqvist cogió nueve muestras de diferentes monasterios pertenecientes supuestamente a un fémur, diente, piel de la mano, pelo y muestras fecales. Los análisis no dejaron lugar a dudas: "De las nueve muestras, una resultó provenir de un perro, pero las otras ocho eran de diferentes especies de osos que actualmente habitan en la región, como los osos negros asiáticos, osos marrones del Himalaya y osos marrones tibetanos"
Llegados al S.XX con los avances en los utensilios de escalada y las ganas de superación del ser humano consagradas en ascender los diferentes “ocho miles” del planeta, se produjo un caldo de cultivo para que se viralizaran los avistamientos del Yeti o su primohermano de los bosques: Muchas historias sobre él, huellas en sitios recónditos (bosques de escaso tránsito o a muchos kilómetros del altitud de las grandes montañas) y restos de animales que en la mayoría no eran siquiera de homínidos.
FOTO DE SHIPTON Y WARD
En octubre de 1958 la historia cambia de continente cuando el periodista Andrew Genzoli hizo vox populi una carta de un lector, Jerry Crew, al publicarla en el periódico para el que trabajaba el "Humbold Times", en ella se podía leer la siguiente frase: "Tal vez tengamos un pariente del Abominable Hombre de las Nieves del Himalaya", tras haberse encontrado por primera vez unas huellas misteriosas de gran tamaño y formas parecidas a las humanas en Bluff Creek. Con este descubrimiento y la posterior publicación del la carta había nacido la fiebre de la búsqueda del Bigfoot.
PRIMER ARTÍCULO SOBRE EL BIGFOOT EN EE.UU.
El siguiente episodio recordado también fue en Bluff Creek (1967), cuando dos vaqueros Bob Gimlin y Roger Patterson consiguieron grabar en un bosque durante escasos segundos a una extraña criatura peluda de notable altura respecto a un humano: "Estábamos cabalgando junto al arroyo, disfrutando de un cálido día de sol. Entonces, al otro lado del arroyo, vi algo de pie. Todo sucedió muy rápido. Caminaba erguido y durante bastante tiempo. No parecía un oso. He estado en el bosque toda mi vida y no tengo ninguna duda en mi mente de lo que era". Tal fue el alcance de la noticia que el propio FBI se puso a investigar el caso tras ver las imágenes pero no encontraron nada tras una exhausta investigación.
"LAS PRUEBAS" DE LA EXISTENCIA DEL YETI SEGÚN BURTSEV
Lo único cierto en esta historia es que miles de personas han dicho ver en los últimos tres siglos, pero nadie ha aportado una prueba sólida a la ciencia, muchas pruebas falsas y nada encontrado en algunas investigaciones que han durado 50 años tras los avistamientos.
4. RADIOGRAFÍA DE BIGFOOT O SASQUATCH SEGUN LOS AVISTAMIENTOS
PRIMER AVISTAMIENTO:Según el periódico Watchman en su edición del 22 de septiembre de 1818, en el artículo "Wild man on the woods"(Salvaje en los bosques) se hablaba de un supuesto primer avistamiento:"...Un animal con un olor inconfundible a humanidad. Tenía una estatura gigantesca, su cuerpo estaba cubierto de pelo y en la cabeza unas cejas y barba muy pobladas que se unían con su cuello y hombros". Nadie le dio mucho bombo al artículo pero es la primera prueba de la historia en Estados Unidos en su etapa contemporánea.
ALTURA:Casi todos coinciden en otorgarle una altura entre 8 y 9 pies (de 2,45 metros a 2,75)
TAMAÑO DE SU PIE: La media de sus huellas miden 39,62 centímetros, para hacernos una idea Shaquille O'Neal que mide 2,20 tiene un pie de 38 centímetros, de los más grandes del mundo.
HÁBITOS: Es un animal nocturno, ya que no le gusta toparse con el ser humano, por tanto posee una gran vista para moverse en la oscuridad. Aguanta bien el dolor, ya que su cuerpo está diseñado para atacar, por ello se piensa que es omnívoro y que se alimenta de animales de diferentes tamaños que caza en lo noche.
ANCESTROS: Los científicos pensaban que descendía directamente del Gigantopithecus blacki, pero hay otra teoría que puede ser un híbrido entre humanos y homínidos hace unos 15.000 años, de la cual hablaremos más adelante.
¿CUÁNTOS HAY EN EE.UU?: Nadie lo sabe, pero haciendo caso a los avistamientos se estima que haya entre 2.000 y 6.000 esparcidos por todo el territorio. Encontrándose al menos en dos lugares diferentes en cada uno de los estados, incluyendo Hawaii pese a ser una isla.
LUGARES CON MAYOR NÚMERO DE AVISTAMIENTOS: Los cuatro primeros lugares los ocupan Washington con 541, seguido de California (425), Oregón (227) y Ohio (212).
¿QUÉ TIPO DE PERSONAS LOS BUSCAN?: Esencialmente dos, los que quieren encontrarlos para crear un hábitat en el que puedan procrear y salir adelante y los cazadores, a quienes les encantaría tener uno disecado en su casa si existiera y poder fardar de haberle matado ellos.
5. ¿QUÉ OPINAN LOS CIENTÍFICOS?CADÁVER FALSO DE BIGFOOT
Otro hecho a tener en cuenta es que si los humanos hemos convivido toda nuestra historia con un animal así, si borramos las antiguas leyendas de seres mitológicos de las diferentes culturas, sólo en los últimos tres siglos hemos tenido "pruebas de su existencia", si bien muchas se han probado que son falsas, la mayoría buscaron encontrar un negocio lucrativo en la búsqueda del homínido y las pocas que han dejado en duda a los resultados científicos, bien podrían ser pruebas contaminadas a posta o sin querer que han dejado solamente resultados no concluyentes. Eso no quita que la labor científica siga estudiando las pruebas obtenidas de éste y otros seres en busca de categorizar nuevas especies que el ser humano todavía desconocemos a pesar de los miles de años de historia a nuestras espaldas, la mayoría son de origen marino (es obvio que es más difícil encontrar especies submarinas de las profundidades y que no hemos tenido muchos medios hasta ahora), pero se siguen encontrando nuevas formas de vida terrestres y hay que seguir buscándolas...
Son miles de personas que han asegurado haberlo visto y tener pruebas de ello y los científicos llevan más de sesenta años cotejando las pruebas, incluso existen especialidades como la criptozoología–pseudociencia, una rama científica dedicada exclusivamente al estudio de animales ocultos, que están deseando validar alguna de ellas. Es en este campo donde podemos encontrar a los científicos que se aventuran hacia una afirmación sobre su existencia, cuando la mayoría de sus colegas abogan por un rotundo no. En la última década si cabe, han sido mucho más escépticos que en las anteriores tras lo ocurrido en Georgia en agosto del 2008, cuando dos excursionistas Matthew Whitton y Rick Dyer se encontraron con un "cadáver de Bigfoot", para confirmar dicha historia presentaron como pruebas un par de fotos de mala calidad y una prueba de ADN. Antes de apresurarse a anunciar una noticia tan viral, los científicos analizaron la prueba genética y descubrieron que esos restos pertenecían a una zarigüeya (Didelphis virginiana). Un engaño más en la larga cadena de pruebas que han sido investigadas a lo largo de la historia, y van más de mil cien de éstas.
Tampoco deja mucho títere con cabeza cuando habla a los científicos que se dedican a buscar indicios de su existencia, aunque él este metido de lleno en el ajo: "En la historia de la ciencia, el campo que mejor conozco, a los historiadores se les concede la credibilidad y el prestigio del tema que estudian: de modo que los historiadores de la física son los más prestigiosos, los historiadores de la química menos, y más allá. Los historiadores de la pseudociencia, entonces, definitivamente están fuera de los caminos trillados Otros académicos suficientes entenderían el trabajo para que valiera la pena, pero siempre habría algunos que olfatearon y miraron el tema para hacer que escribir sobre Bigfoot sea una propuesta algo arriesgada, especialmente para un joven académico como yo". Pero Blu va incluso más allá con una teoría conspirativa de la que también hablé de pasada en el post CUESTIONANDO LOS ENCUENTROS CON EXTRATERRESTRES y que viene refrendada por sus palabras: "Que la gente se centrara en finales de los años 60 buscando un animal inexistente, también sirvió al gobierno como una distracción para sus conciudadanos de la Guerra Fría. Debajo de todo esto también hay una dimensión de clases sociales. Los científicos que estaban a cargo de la carrera armamentista eran miembros de la clase media. En cambio, muchos de los bigfooters fueron de clase obrera".
Y es que con sus palabras Joshua hace un gran resumen de lo que la mayoría de la comunidad científica piensa de los estudios de cualquier críptido, décadas de estudio que se resumen en errores, bromas y fraudes, si no hay una prueba orgánica que evidencie de manera coherente su existencia, el escepticismo se multiplica exponencialmente.
A Jeffrey le salió un duro oponente el antropólogo de la Universidad de Florida David Daegling, autor del libro "Bigfoot Exposed" (2004) que rebate con sus hechos cada una de las pruebas dudosas que ha estudiado el primatólogo y es que cada científico que planee plantear dudas sobre la existencia de este homínido, les salen otros tantos detractores y su profesionalidad termina puesta en duda.