Detectores de billetes falsos, todo lo que debes saber

Publicado el 02 febrero 2018 por Seomaker @envaldemoro

Eficaces, multidivisa, fáciles de usar, pequeños y portátiles, duraderos..., te contamos qué son, cómo funcionan, qué garantías deben ofrecer y cuál es el mejor del mercado.

¿Qué es un detector de billetes falsos?

Los detectores de billetes falsos son dispositivos electrónicos capaces de detectar en pocos segundos si un billete es auténtico o estamos ante una falsificación. Si tenemos en cuenta que el fraude por la circulación de estos billetes amenaza a la economía moderna hasta el punto de que influye negativamente en el aumento de la inflación, entenderemos lo rápido que se ha extendido su uso y la necesidad de contar con uno de ellos en aquellos negocios que aceptan dinero en efectivo como forma pago.

Por este motivo, cada vez es más habitual encontrar comercios de cara al público que disponen de alguno de estos aparatos electrónicos como forma de precaución frente a una actividad muy dañina para la empresa. Contar con un buen detector de billetes falsos para utilizar en cada transacción es la mejor manera de protegerse frente al fraude.



¿Cómo funcionan?

Todos los billetes de curso legal deben de contar con una serie de características de seguridad, como impresión en relieve, hilo de seguridad, marca de agua visible al trasluz, banda holográfica o banda iridiscente en el reverso, sin embargo, la mayoría de estos detalles precisos no son apreciados a simple vista por el ojo humano.

Un buen detector de billetes falsos debe contar pues con varias técnicas simultáneas de detección para ser completamente efectivo. En concreto, huye de aquellos aparatos que no utilicen estas siete técnicas de detección:

  1. Luz ultravioleta: Todos los billetes contienen tinta ultravioleta y ésta puede detectarse mediante fósforos fluorescentes. Si el billete introducido no emite esa fosforescencia, automáticamente avisa y lo rechaza.
  2. Detección magnética: También disponen de tinta ferromagnética, de varios colores, que resulta sensible a los campos magnéticos. Por muy complejos que sean los patrones utilizados, un buen detector de billetes dará la señal de alarma.
  3. Infrarrojos: Los colores utilizados para fabricar billetes son complejos y difíciles de reproducir. Con la detección infrarroja se emite un tipo de luz concreta para analizar cómo se comporta ésta sobre el billete (si la absorbe o la refleja), pudiendo discernir si se trata de una copia o no.
  4. Detección por hilo metálico: Los billetes originales contienen fibras metálicas en tamaños y lugares específicos cuya presencia puede detectarse mediante el uso de imanes.
  5. Marcas de agua: Son apreciables al trasluz y se realizan mediante diversos grados de grosor al papel. Si se coloca el billete sobre una superficie oscura, las zonas claras de la marca de agua se oscurecen. Los detectores son capaces de reconocer esta señal traslúcida.
  6. Hologramas: Se trata de las bandas plateadas que se encuentran en las esquinas de los billetes actuales. Se realizan con un material metálico concreto, difícil de falsificar pero no de descubrir.
  7. Tamaño y espesor: Cuando un billete es más o menos largo, ancho o grueso de lo que son los emitidos por los distintos bancos centrales, los sensores de la máquina detectan que estamos ante una falsificación.



¿Qué se le pide a un buen detector de billetes falsos?

La adquisición de un detector de billetes falsos no supone un gran desembolso, pero puede convertirse en un gran beneficio para el negocio e incluso facilitar el ahorro. En el mercado existen muchas ofertas pero antes de lanzarse a la compra hay que tener bien claras las funciones que éste debe cumplir. Lo más importante es que sea preciso al 100%, garantizando que no haya ningún error en la medición. También hay que valorar que maneje el mayor número de divisas, no solamente el euro. Otros aspectos importantes son el tamaño, mejor si es pequeño, la portabilidad a cualquier lugar y, por último, que sea fácil de usar y duradero.

Para evitar las cada vez más sofisticadas formas de falsificación de los defraudadores, en noviembre de 2015 se puso en circulación el nuevo billete de 20 € y en abril de 2017 el nuevo billete de 50 €, con renovados elementos de seguridad. Sin embargo, el papel moneda ilegal sigue en el mercado. Sin datos aún de 2017, en la zona euro se detectaron en 2016 cerca de 900.000 billetes falsos. Conviene conocer también que los billetes de euro más falsificados en el mundo son los de 50 € y los de 20 €, hasta el punto de que sólo ellos dos acaparan el 80% de los billetes falsos que andan en circulación.

¿Cuál es el mejor detector de billetes falsos?

Hoy en día existen muchas pymes que comercializan detectores pero no todas garantizan que éstos hayan sido probados satisfactoriamente. Tampoco certifican que estén adaptados a los nuevos billetes de la Serie Europa, puestos en circulación en los últimos meses, o dejan fuera divisas tan importantes como el dólar.

En Hilton Europe, una de las principales empresas del sector, todas esas necesidades quedan cubiertas, garantizando la máxima fiabilidad y calidad en todos sus equipos. Disponen de cuatro modelos pero acaban de comercializar el HE-360 SD, que por sus avanzadas prestaciones se convierte en el mejor del mercado.

La fiabilidad de este modelo compacto y fácil de manejar está totalmente garantizada y probada gracias a los siete métodos de medición precisa antes citados de los que dispone. En cuestión de décimas de segundo se sabe si el billete es falso o auténtico. Además, verifica hasta ocho divisas, pero en su memoria se pueden programar 75 monedas más de todo el mundo con la combinación deseada. Cantidades que se pueden visualizar en la pantalla, de cristal líquido y alta resolución, de forma total y parcial de cada una de las divisas empleadas. Ante un billete falso, avisa visualmente, emite un pitido y rechaza el papel.

También, como su propio nombre indica, dispone de una tarjeta de almacenamiento SD para que en caso de haber alguna actualización ésta pueda hacerse a través del cable o de la tarjeta micro SD. Así como de una batería de litio para poderlo transportar fácilmente.

Un seguro infalible contra las falsificaciones.