Detenidos Teddy Bautista y la cúpula de la SGAE

Por Alejandropumarino

Teddy Bautista fue el gestor de la Sociedad General de Autores que multiplicó los ingresos de la entidad, poniéndola en el lugar que ocupa hoy en día, y también responsable de las campañas recaudatorias, próximas a la extorsión, que la SGAE llevó a cabo en establecimientos públicos alejados del espectáculo, como las peluquerías, a las que se pretendía cobrar por poner la radio. La defensa de los intereses de artistas menores y su precaria situación al terminar su edad laboral, fueron la excusa de este afán recaudatorio del Sr. Bautista, modelo de ejecutivo a seguir por cualquier empresa pública o privada.

Pero parece ser, que existían desvíos del capital obtenido mediante esta suerte de impuesto revolucionario, hacia las cuentas privadas de algunos dirigentes de la SGAE, entre los que se encuentra, como no, el propio Teddy Bautista, de suerte tal que, además de esos intereses de artistas pobres, se defendía le economía de un hombre que ya ganaba doscientos cincuenta mil euros al año, más que el presidente del ejecutivo, y a quien, por lo que se ve, esta cantidad resultaba escasa. Nos confesaba entonces el interfecto, que se trataba de un sueldo proporcional a su propia valía y a los servicios que había prestado a la entidad pagadora; no sabemos si además, debería percibir otras retribuciones de sí mismo, por el interés con el que desviaba fondos en su propio beneficio.

La situación no puede ser más esperpéntica: El presumible defensor de los artistas menos favorecidos, se quedaba con una sustancial parte de la recaudación que obtenía la Sociedad General de Autores tras extorsionar a pequeños empresarios que apenas llegaban a fin de mes, o de pretender cobrar en conciertos benéficos y celebraciones religiosas. El único Dios que mueve el mundo tiene espíritu económico, aunque la lo dijese Quevedo hace muchos siglos: Poderoso caballero es don dinero.