Después del verano nadando en el río y rebozándose en la arena en plan “croqueta” a mi pobre Lussy, una guapa, simpática, amigable y cariñosa Fox Terrier le tocaba ir a la pelu si o si , sus pelos blancos se habían convertido en rastas y nudos y no podía peinarla ni con el tenedor jaja ( modo sirenita ) . Nuestra antigua pelu había cerrado justo antes de las vacaciones, estábamos en búsqueda de una nueva … por suerte descubrimos Oh my Can! donde los dos perretes de la casa nos daban la bienvenida.
En principio ya me había hecho a la idea que tendrían que raparla del todo, pero después de dos horas de horas de trabajo con ducha, corte y muuuucho cepillado consiguieron rescatarle sus barbas y un pequeño faldón para que conservara “El look Fox Terrier” me habría gustado hacerle más fotos del nuevo look, pero Lussy estaba tan emocionada que no paraba de correr y fue imposible pillarla, lo único que la calmó por un momento fueron las galletas de huesitos.
Lussy os manda recuerdos a todos!