La empresa CellScope acaba de comercializar un gadget que convierte un teléfono inteligente en un otoscopio. De momento sólo funciona con iPhone y en el mercado americano, pero está trabajando en una versión para los diversos sistemas operativos y en la introducción en otros países. El CellScope incluye un microscopio y un programa para captar las imágenes de una forma muy simple. Se podrá utilizar, con otros cabezales, en dermatologia o para analizar muestras humanas. Se comercializa en dos versiones: la de padres (home) y la del especialista (Pro). Las instrucciones proporcionadas por el fabricante describen cómo se debe realizar la exploración.
En cuanto pueda me lo compro.