Diamantes para la Eternidad de Misha Tal (85)

Por Aarteaga61

Ahora sí que se podía decir que Misha Tal era "casi" el flamante nuevo Campeón del Mundo de Ajedrez, tras su brillante victoria acaecida en la 19ª partida del Gran Match de 1960, lograda en 41 movimientos.

El mago de Riga tenía ¡cuatro puntos! de ventaja y sólo quedaban cinco partidas más en juego, por lo que ya resultaba prácticamente imposible que el Patriarca del ajedrez soviético, Mikhail Botvinnik, le pudiera poner freno.

La partida Tal-Botvinnik (19) 1-0, se puede seguir, aparte de en las fuentes que trataron el match por completo y aquí mencionadas con anterioridad muchas veces; también en los libros sobre la vida y obra de Misha Tal: de Clarke, de Lakdawala, de Hajtun, de Károlyi (2), así como en el libro Al Ataque de Tal & Damsky y en el libro Magia en el Tablero (I) editado por la Editorial Chessy y también, como no, en el tomo número II (de V) del aclamado serial de Garry Kaspárov titulado Mis Geniales Predecesores. 

Para esta ocasión he seleccionado los análisis del virtuoso maestro y pedagogo del ajedrez hispano, Román Torán, publicados en la "desaparecida" Revista El Ajedrez Español:

El apasionado público moscovita sigue la 19ª partida del Mundial de 1960,por fuera del Teatro Pushkin, que a su vez estaba dentro, repleto de gente. Los mundialitos de hoy en día de la F.I.D.E. sólo lo ven "los miembros de la F.I.D.E.", pues posibilitar que se decidan con "pachanguitas" rápidas al final, lo desvirtúan por completo.

Queridos amigos, como dice la vieja canción, "tres lágrimas nada más ayer derramé por ti...". Menos mal que tenemos mucho todavía por descubrir en la historia del ajedrez (!?) y así de esta forma no perdemos el tiempo observando las minucias organizativas de la actual F.I.D.E. (Federación Internacional de Ajedrez) que deambula por el mundo con más pena que gloria:


Angel Jiménez Arteagaaarteaga61@gmail.com