Es fin de mes y es fin de año. Ojala no fuera tan fanática de los cierres y los finales, estoy ansiosa por que termine este año pero al mismo tiempo… Que es el tiempo de todas formas.
Octubre fue un baile, pero Noviembre fue subirse al Samba después de un cajón de birras. Todo se agitó y revolucionó. Lo bueno es que en semanas mi mundo va a estar calmo y relajado otra vez durante algunos meses, volveré al gimnasio y si el clima lo permite podré disfrutar de unas merecidas vacaciones en la playa con mis hijos, cerca de mi familia.
Mientras esperamos a que terminen estas épocas de finales y mudanzas, las dejo con los fragmentos de mi vida que filme este mes. Hacer blogs es cada vez más natural en mi.