Deskarte salió en modo dúo, canciones como Desierto, El Odio o Mientras que el mundo duerme que son de su disco más actual no podían faltar, siempre adaptadas a su sonido acústico de dos guitarras, canciones directas donde sus voces se iban mezclando, o aportando detalles y brillos al tema. Un directo con pocos parones, donde las canciones se adaptaron perfectamente y donde recordaron propuestas previas pero sobre todo mostraron las bondades de estos temas nuevos que no perdieron la esencia rock pero ganaron sonido y sabor a autor más íntimo sin perder la atención de la gente.
NoProcede estaba destinado a demostrar que en acústico crecen, ya pasó en el inicio del show con Beltrán solo o en formato trío. Un concierto más reflexivo, con intensidad y donde se dio recuerdo a la industria, la gente que ha trabajado en hospitales y otros servicios esenciales sobre la pandemia y sobre todo a los fans. Del repertorio, colección de canciones, colección de emociones y las voces posicionadas por encima de la parte instrumental, mostrando la potencia, rabia y sentimientos generalizados de este show donde sus fans dieron ese pasito a delante para estar más cerca y donde quisieron, supieron y pudieron estar ahí mostrando esa unidad. Acústico por y para sentir cerca el amor de la banda por los directos y por la familia que han formado.
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