Dias: 20,21,22,23,24 y 25 parece que los terminaré en bloque

Publicado el 26 septiembre 2012 por Nyra @nyra

Día 20. Un libro leído recientemente.

Recientemente he leído varios, necesito aprovechar el tiempo ya saben. En esta ocasión creo que nombraré el libro de Rachel Antúnez "Las tarantulas venenosas no siempre devoran a los dioses griegos". porque una vez mas percibo que lo extenso de un libro no delimita su calidad, a pesar de que quedé añorando leer algo extra sobre la historia, fue una gozada sus pocas paginas. Otra particularidad que agregar sería el interminable titulo, que excepto por los dos volumenes de Millenium no había visto uno tan largo recientemente . XD  Día 21. Un libro que prestaste y que no te devolvieron.
Día 21. Un libro que prestaste y que no te devolvieron.
Bueno eso me ha pasado con una cantidad muy grande de libros, tanta que mejor no digo. Es una quimera por la que paso y que aborrezco con el alma. Muchas veces la gente no entiende el concepto de préstamo y por ello deciden quitarnos nuestros tesoros de papel y simplemente llevarselos, con la excusa de que te lo devolverá "cuando termine". Lo mas triste de todo es que a veces ni siquiera los leen, otras veces los tiran en cualquier parte y terminan dañandolos. Suelo evitar prestar mis libros ahora, pero como mi intención es que todos los que conozco comiencen a leer aunque sea poco, pues caigo una y otra vez. El ultimo préstamo fatal que hice fue de hecho de un libro firmado y dedicado, el cual aun lloro ;( y si, soy trágica con estas cosas. Porque no se imaginan la cantidad de paquetes que nunca a llegan a destino, este libro era especial pues sobrevivió eso. De la persona que lo tiene, desconozco su paradero pues se mudó de ciudad y su móvil sale desconectado. Así que, ¿que más queda decir?. Si pides prestado un libro, por mucho que lo quieras o lo odies por favor devuélvelo. 
Día 22. Un libro que sea la joya de tu biblioteca. Todos y cada uno de ellos! Excepto los que no me gustaron jajaja XD. Todos han tenido su historia así que no voy a decir a que hijo quiero más jajajaja. 


Día 23. Un libro de tu carrera, estudios, etc.
Introducción a la teoría general de la Administración de Idalberto Chiavenato. No es que me gustará particularmente, sino porque tiene su historia. Cuando empecé la carrera de administración hace un par de años, pedí como prestamo ese libro en la biblioteca de la universidad; un "compañero de clases" se lo llevó a escondidas de mí (saben que quiero decir con eso , ¿verdad?) y cuando lo busque por todos lados nunca apareció el libro y "nadie" sabia donde estaba, y como era de la biblioteca de la universidad me gané un gran lío, me suspendieron el servicio de la biblioteca y hasta que no pagara el libro no podría inscribir un nuevo semestre. Bueno, pues me toco comprarlo y no encontraba el fulano libro en ninguna librería, por lo que tuve que viajar y pedirlo a catalogo a la editorial. Meses luego, apareció mágicamente el libro (el perdido). "El compañero de clases" que mencioné, me contó un cuento de lo más trillado justificándose porque él lo encontró y no sabia que era de la biblioteca ni que estaba bajo mi responsabilidad. Mentira!! El gigantesco sello de la biblioteca lo tiene el libro en su primera pagina *-*. Desde entonces el libro que era de la biblioteca ahora es mio Moraleja:Al igual que el dinero no tiene amigos, los libros costosos tampoco.
Día 24. Un libro que leíste en verano. ¿Uno? Pues a ver, ya he nombrado uno así que tal vez deba decir Bajo el Cielo de Dublin de Maeve Binchy, pues tiene una historia de una familia atípica y conmovedora. Contiene un mensaje profundo que me conmovió y me gusto mucho. Día 25. Un libro que no leíste entero. La elegancia del erizo. Realmente lo intenté hasta que la cuarta vez me dije, no puedo. Pierdo tiempo cuando otro libro que a lo mejor me agradará esta esperándome. Fue una decepción que me aburriera en poco menos de la mitad. Pero francamente no sentí la esencia del libro. No se si mejora luego pero, me aburrí completamente, al punto de no querer seguir con él. Cosa que aclaró, me sucede escasamente. No se si lo termine alguna vez, allí lo tengo en mi estantería mirándome con su lomo acusadoramente. Nyra