me dejas ver,
te dejas ver.
Tus ojos hablan quedos.
Las pupilas dicen,
las pestañas escriben,
párpados, luces discontinuas.
Ambos nos desciframos:
el lenguaje
y nuestros diccionarios.
Millares de notas,
valores a cientos,
puntos, datos, tildes, censuras.
Hallas una acepción
y aplaudo el logro.
Quien traduzca
atrapará su laurel.
Sin lenguas francas.
Cada cual la suya,
definiendo al otro.