Título original: Dictado
Año: 2012
Duración: 95 min.
País: España
Director: Antonio Chavarrías
Guión: Antonio Chavarrías (Historia: Sergi Belbel)
Música: Joan Valent, Zacarías M. de la Riva
Fotografía: Guillermo Granillo
Reparto: Juan Diego Botto, Bárbara Lennie, Mágica Pérez, Marc Rodríguez, Ágata Roca, Nora Navas
La vulnerabilidad de una niña expuesta a la locura de sus mayores.
Laura y Daniel deciden temporalmente acoger a Julia, cuyo padre y amigo de la infancia de Daniel se acaba de suicidar. La pequeña despertará en esta joven pareja emociones muy confrontadas, en Laura la felicidad máxima de ver sus deseos de ser madre hechos realidad y en Daniel el desasosiego de ver florecer un terrible suceso el cual tenía escondido desde su niñez.
“Tengo una paloma, punto y coma, pero ya se ha ido, punto y seguido. Se fue a Marte, punto y aparte. Era un animal muy sensacional. Punto y final.” Dicta la canción que debe proteger a Julia (Mágica Pérez) de los monstruos, y la pregunta es, ¿Qué protegerá a los mayores de sus monstruos?
Antonio Chavarrías (Las vidas de Celia) adapta la historia original de Sergi Belbel para crear una cinta a medio camino entre el suspense y el terror, anteponiendo durante todo el film la intriga de una niña más misteriosa de lo que parece a simple vista y una historia subyacente en uno de los protagonistas con algunas escenas al más puro estilo del cine de terror, sin pretender generar susto, pero si generando tensión en los espectadores.
En el reparto de Dictado brilla el trabajo bien logrado del director, al crear un vínculo con la debutante y pequeña Mágica Pérez que encandila al publico más exigente desde su primera aparición. Esta valiosa aportación en el reparto es completado en un triangulo que funciona a la perfección con Bárbara Lennie (La piel que habito) y Juan Diego Botto (Martín (Hache)), ambos acertados en sus interpretaciones de pareja feliz que buscan su primer hijo sin éxito.
En lo referente al apartado técnico de Dictado, sorprende, un tratado de la luz muy natural, con una claridad constante que da más valor a una película que de por si, cualquiera trataría de plantearla oscura, en un trabajo de puntualizar más todavía el suspense y que sin esa pequeña trampa, el director de fotografía bajo las ordenes del director ha sabido lograr con éxito.
Siempre lo he pensado y siempre lo diré, las personas, en especial los niños que parecen divinamente tocados por la providencia e imposible de que no sean angelitos, dan más miedo que los propios fantasmas.
Firma: Gerard FM.