Diez consejos para no engordar (I)

Por Rafael @merkabici

Lo hemos intentado de todas las maneras posibles. Te hemos dicho que dentro de poco entramos en la vertiente más importante de la temporada cicloturista, aquella que aglutina el mayor número de pruebas de esas que todos queremos correr. Te hemos comentado que reducir peso es fundamental para que asciendas a una velocidad mejor, que también te ayudará en el llano y a aumentar tu capacidad de recuperación. Incluso te hemos llegado a comentar que el sobrepeso es perjudicial para tu salud y que bajar unos kilitos te vendría genial para tu puesta a punto física general, por lo que tu calidad de vida iba a mejorar mucho.

Todo eso te lo hemos dicho…y nada. Porque, amigo, eres un poco zampón, y cuando tienes delante de ti el pincho de tortilla no te lo piensas. Y no te hablo de ese pincho en mitad de una larga salida cicloturista, no, porque ese está bien justificado. Qué va, te hablo del que te comes cuando estás tranquilamente en una terracita leyendo el periódico, en esas mañanas que no has salido porque eres un poco vago y que te pasas sin hacer nada. Y el que dice el pincho de tortilla dice las rabas, o las tapitas, o las patatas fritas o lo que sea. No hemos conseguido quitarte esos vicios con argumentaciones ciclistas. Así que hemos decidido intentar otra cosa…¿lo adivinas?

Sí, amigo, te vamos a hablar de la operación bikini. O de la operación bañador, que viene a ser lo mismo. Porque ahora que se acerca el verano no querrás ir a la playa con esos kilos de más que vienes arrastrando desde las navidades, ¿verdad? Quiero decir, bastante nota das en playa y piscina con esas estéticas marcas de ciclista como para encima parecer gordo. Porque entonces, si sigues con kilos de más, ¿para que consigues las marcas? Vamos, eso es algo que nadie va a entender. Así que desde aquí vamos a darte un decálogo (que ya sabes que desde antiguo es la forma más ordenada de disponer las cosas) de consejos para que no engordes e incluso adelgaces un poquito de cara al verano. Y como sabemos que eres un glotón te lo vamos a dar en dos partes, para que no te caiga indigesto…

  1. Cuidado con los hidratos de carbono. Ya sabemos que te encanta la pasta y el arroz, y que además estamos hablando de la gasolina ideal para el ciclista. Pero intenta, siempre que puedas escoger algunos carbohidratos de bajo índice glucémico, que son los contenidos en productos integrales, frutas, verduras y legumbres. No te decimos que siempre tomes de estos (el arroz integral, por ejemplo, tarda más en hacerse que el normal, por lo que es peor si no cuentas con mucho tiempo para cocinarlo) pero sí que intentes compaginarlos con los hidratos “habituales”.
  1. Limita el consumo de frutos secos. Sí, sí, ya sabemos que en otras ocasiones te hemos recomendado frutos secos debido a su bajo índice glucémico y su alto porcentaje de carbohidratos. Pero piensa que son alimentos con un gran número de calorías, por lo que debes de limitar su ingesta si quieres controlar un poco tu peso. De nuevo la cabeza tiene la clave, por lo que si consumes unos pocos no tendrás nada que lamentar…pero no te vuelvas loco con la bolsa, por favor…

  1. Aquí también vas a utilizar la cabeza. Y es que en muchas ocasiones nos equivocamos cuando nos sentamos a la mesa debido a la exactitud de nuestros aparatos deportivos. En otras palabras, nuestro computador de bicicleta (hace tiempo que dejaron de ser solo pulsómetros o cuentakilómetros) nos dice que hemos consumido 3000 calorías en un entrenamiento, por lo que pensamos que comiendo solo 2000 estaremos aun en déficit, o lo que es lo mismo, adelgazando. Esto no es así realmente, y depende de un montón de variables de las que otro día hablaremos. Así que lo importante es que te quedes con esta idea…no hagas una sencilla regla de tres, porque puedes equivocarte por completo.