Aprovechando que he revelado mis fotos, sí ya sé que suena raro. Efectivamente me compré este año una cámara lomográfica, modelo Diana F+, que tiene carretes. Por lo que hay que dosificarse, pero al contrario que las cámaras digitales ya sean las compactas o las reflex, resultan mágicas. Ofrecen unos colores, texturas con ruido, grano y a veces en un mismo fotograma se te cuela algo insospechado.
Como hace varias semanas escribí sobre el jardín de Nadine, aprovecho, para enseñaros las fotos del jardín, realizadas con dicha cámara.
Como se puede apreciar en las fotos, los colores son diferentes, los bordes son más oscuros. Lo que hace que sean fotos, diferentes a las que salen de nuestras cámaras digitales.
Como he comentado antes, ya que en varios post he hablado del Jardín de Nadine, he pensado que se pudiera comparar las imagenes anteriores con estas.
A continuación expongo imagenes de otros jardines, para que os podais hacer una idea, de lo mágico de estas cámaras, por supuesto hay que decir, que no sólo es mágico la herramienta con la que se obtiene la imagen, sino el lugar. Quizás sea una manera de distinguir si es el espacio es un espacio vivo.
Estas imágenes corresponde a uno de los jardines del Chelsea Flower Show que en anteriores post ya he comentado.
A continuación fotos de un jardín glorioso: El Romeral de San Marcos de Leandro Silva.
Bueno y con esta sesión de fotos, queda demostrada, que es importante que las cámaras de fotos, son necesarias para los paisajistas, que es interesante conocer las distintas opciones.
Espero que este efímero paseo por alguno de nuestros jardines os guste.