Optar a un puesto de trabajo puede, en la mayoría de las veces, embarcarnos en un proceso complejo con diferentes metodologías. Procesos que incluyen multitud de opciones dependiendo del puesto, el reclutador y la metodología aplicada. Puede ser que lo tengamos resuelto con una entrevista directa y sea algo sencillo o por el contrario, nos tengamos que sumar a un complicado proceso con varias entrevistas, exámenes e incluso, dinámicas de grupo para selección de personal. Estas últimas, por desconocidas y poco habituales en nuestro entorno, son temidas por los aspirantes. ¿Cómo son, en qué contexto se desarrollan, qué hacer para superarlas con éxito?
Dinámicas de grupo para selección de personal
En los últimos tiempos, las dinámicas de grupo en los procesos de selección son cada vez más habituales. Y es que es importante percibir y comprobar (en la medida de lo posible) el comportamiento del candidato en un equipo de trabajo.
Trabajamos y desarrollamos nuestra actividad en grupo. Estamos rodeados de otras personas con las que en el día a día tenemos que interactuar. Cómo nos comportamos, cómo nos relacionamos, cómo solucionamos situaciones en ese escenario es fundamental para determinar y dejar patente nuestras capacidades más allá de la formación explícita y la experiencia laboral.
De ahí nacen y parten las dinámicas de grupo en los procesos de selección. De la necesidad de ver y comprobar esa aptitud en los aspirantes antes de realizar su contratación. Poder vivir en tiempo real y en directo una actividad grupal y poder evaluar cómo se desenvuelven y relacionan los integrantes del grupo.
¿Qué es entonces una dinámica de grupo para selección de personal? Son una parte de un proceso de selección en la cual se incluyen a otras personas más allá del entrevistado – entrevistador. Normalmente son incluso los demás aspirantes al mismo puesto o miembros de la empresa (la primera opción es la habitual). A través de una serie de supuestos y actividades grupales, los reclutadores identificarán las aptitudes de relación, empatía, generosidad, liderazgo así como otras necesarias en el comportamiento de cada uno.
La ansiedad en una dinámica de grupo de selección de personal
Si bien las dinámicas de grupo para selección de personal son muy positivas desde el punto de vista y posición del reclutador (se puede ver diferentes aptitudes de los aspirantes que de otra forma no se detectarían), para los participantes suele suponer un foco de ansiedad importante.
Si en un proceso de selección nos sentimos (cuando somos los aspirantes) bastante juzgados (de eso va una selección, de que nos evalúen y juzguen para determinar si somos válidos), en una dinámica de grupo esa evaluación se multiplicará exponencialmente. Y es que no solo tendremos a un entrevistador evaluándonos sino que se suman otras personas que además, son rivales.
El juicio es exponencial y multiplicado y eso, nos llevará sin duda, a un nivel de ansiedad muy superior. Es uno de los puntos que hay que saber controlar y que se juzgará en estas dinámicas de grupo para selección de personal. Saber gestionar esa ansiedad ante el estrés que supone que otras personas nos juzguen y además, que sean nuestros rivales… Es un plato fuerte, mucho.
Por eso, hay que saber prepararse para estas dinámicas, estar enfocado en nuestros objetivos y sobre todo, saber gestionar la ansiedad producida por el juicio extremo sin caer en los extremos: ego o humildad exagerada.
El equilibrio será el mejor aliado en estas dinámicas. Hay que saber comportarse en grupo sin rivalidad que nos coarte para ejercer nuestro trabajo de la forma más eficaz, sin quebrantar un grupo… Todo, será evaluado para determinar nuestra capacitación para el puesto.
Beneficios de las dinámicas de grupo
A priori, podríamos decir que son una herramienta súper valiosa y potente para los entrevistadores y reclutadores. Con ellas podremos determinar y conocer en detalle muchas aptitudes imprescindibles de los posibles candidatos. Sabremos si gozan de esas denominadas soft skills (habilidades – competencias blandas) que van más allá de la formación y la experiencia laboral.
Sin duda, cuando una empresa determina realizar dinámicas de grupo para una contratación está jugando sobre seguro. Aunque todos nos comportemos diferente en una entrevista de lo que luego será el día a día, por supuesto que una dinámica así nos dejará ver muchísimo más de la persona que si solo nos limitamos a una entrevista one-to-one.
Pero, ¿tiene beneficios para los entrevistados? En realidad sí, aunque parezca que no. Una dinámica de grupo nos puede ayudar a identificar aptitudes propias que en otras circunstancias no veríamos. Y eso, es altamente valioso si sabemos quitar el velo del ego, evaluarlo y ponerlo a funcionar a nuestro favor. Y es que vernos en una situación “de riesgo” junto a otras personas rivales y ayudados por las dinámicas guiadas a las que nos someterán, es seguro un aprendizaje muy potente.
En ella, tanto el entrevistado de sí mismo como el entrevistador sobre los aspirantes puede ver aspectos tan cruciales como la creatividad para resolver situaciones, la inteligencia emocional que tenemos para diferentes escenarios, la gestión del tiempo (son actividades muy controladas en el tiempo), la humildad, la tiranía – rivalidad y por supuesto, el liderazgo que tiene cada uno ante un equipo.
¿Cómo actuar en una dinámica de grupo?
Si eres participante en una dinámica de grupo, el mejor consejo que podemos darte es que seas tú mismo. No intentes hacer un papel para encajar. Eso, ni en la vida normal ni en una entrevista de trabajo ni después en el desempeño de tus tareas, va a funcionar. Y si además haces un papel y te contratan, no podrás mantenerlo, te generará estrés y tendrás que ser tú mismo en algún momento… ¡Cuidado entonces con las consecuencias del cambio!
Ser uno mismo es la mejor acción que podemos hacer. Puede que no encajes para ese puesto pero siempre encajas en ti mismo, que es lo importante. Y es con quien más a gusto tienes que estar. Tu actitud, esa que sabes defender porque convives con ella, es la mejor de las actitudes a la hora de una dinámica de grupo.
¿Se puede o debe entonces trabajar estas dinámicas? Por supuesto. Ser uno mismo no implica que no te prepares para algo. Igual que nos estudiamos diferentes tareas para la entrevista porque pueden preguntarnos, indagamos sobre la empresa, etc, también con dinámicas de coaching y acompañamiento se pueden (y deben) preparar estas dinámicas. Sobre todo porque fortalecerás la confianza en ti mismo.