En su línea de xenofóbia racalcitrante y haciendo ímprobos
esfuerzos para que no les salga el africanista sanguinario que
llevan dentro, los cavernícolas llevan unos días haciendo ejercicios
de estilo para calificar la actitud dialogante del Ministro Moratinos,
reconocida y aplaudida por Hilary Clinton. (Otra que tal baila)
En esta ocasión, es de destacar su habilidad diplomática para
titular Morotinos cuando querían decir Moromierda.