A Daniel Insa le tengo catalogado en un club de artistas en los que incluiría a Mist3rfly y a Iván Marcos, los que aunque sean muy prolíficos en su creación, no son capaces de dar un bajón de calidad a sus propuestas sonoras. Y eso, de verás que se agradece.
Vayamos a las canciones, esta vez producidas por él mismo, tras la perdida de alguien muy importante en esas tareas y a quien de algún modo le dedica este trabajo. Ya desde la inicial Lovers In The Dark, nos emociona desde la primera nota y sobre todo con sus formas de pop perfecto, de ese que tanto me gusta y me transporta a los grandes momentos de bandas como Gigolo Aunts o Nada Surf
Otra que me conquistó ya desde del título con su guiño a The Kinks fué Pop Music Preservation Society, de quién también parece beber sonoramente y con su encantadora lírica. No se quedan cortas Pretty Wasted Doll, magia al estilo Tom Petty; Come Back To The Moon, la que en solamente minuto y medio nos conquista sin remedio; la verdad que transmite Party In Heaven, de tonada memorable; o la nostalgia implícita de Trains Are Coming Back To You, con la que no consigo evitar en cada escucha de la misma ir en búsqueda del disco maldito de Frank Sinatra, Watertown. Un álbum que transpira sensaciones y sentimientos auténticos de principio a fin, con todo lo que eso significa.