Desde el primer acorde de la primera canción de este La Gran Aventura, los valencianos L'Emperador nos ponen alerta. Y es comenzar un disco con un temazo del calibre y la potencia de L'Eco i Les Flors es toda una declaración de intenciones.
Se trata de todo un himno indie-rock de resistencia, cosa que queda clara en fragmentos como "si encara no ens hem rendit és per vore'ls aplaudir" o " aprén a distanciar-te, a encaixar cada colp, a no suplicar resurrecció".
A este le sigue otra de las grandes bazas del disco, Cel Del Sud, en la que colabora a modo de diálogo Jorge Martí de La Habitación Roja y uno de los mejores espejos en los que mirarse para las bandas que practican este género. Y cuidado, que toca la patata y de qué manera. Y complementando esa tripleta ganadora con la que arrancan el disco, encontramos La Guerra Dels 100 anys, con un estribillo absolutamente memorable y emocionante. Lo mismo que podríamos decir de Varsòvia, trallazo sonoro que debería enamorar a los que disfrutan de bandas como Viva Suecia o los ya citados La Habitación Roja y de Invencibles, dardo certero donde los haya y desde la primera escucha mi favorita de entre los diez cortes que lo conforman.
Aunque quedarse solamente con los hits más claros es un poco trampa, ya que se manejan perfectamente en los terrenos de ese pop alternativo bien elaborado y con matices de los que pondría como principal referente a Nada Surf y que asoma en canciones tan brillantes como Com Ser Eterns (O Com No Separar-me De Tú) o la reflexiva De Vegades, Sí. Creo que la mejor definición es que Antonio y sus secuaces han creado un necesario compañero de viaje, esa tabla sonora a la que aferrarse en los buenos y en los malos momentos, pero sobre todo un gran disco de pop alternativo en el que el productor Carlos Hernández ha subrayado las muchas virtudes que ya muchos les conocíamos o preveíamos.