A grandes rasgos, me parece así a bote pronto un disco fresco y desprejuiciado y una de las sorpresas más interesantes de lo que llevamos de año.
La primera referencia que tuve respecto a ellos es que tenían puntos a B-52's, cosa que no descarto del todo, pero más bien me parece que han mamado mucho Talking Heads véase en Prince In Blue o Keep The Horse, de Gang Of Four en Adwenture y Cous Cous, o incluso noto las huellas de Pixies en Scotch Whiskey, y no con ello no quiero decir que no tengan un discurso personal y propio, que lo tienen y bien marcado, vaya que si lo tienen.
Ahora, si por una parte me han entrado realmente es por el sonido casi amateur, que me hace pensar en mis adoradas Aias, totalmente evidente en canciones como Hit If Off; Suffisant, o en lo más cercano que tienen a un hit total como Dance The Seance. Con eso me temo que por mí ya tenían el cielo ganado.
Mención aparte para ese singlelazo que es Perro Rompebolas, un puñetazo punk en todo el estómago o una patada con el mismo apellido que el perro, es lo que vendría a ser esta canción, tensión y velocidad concentradas en 1'37''.
Uno de los discos con más actitud que he podido disfrutar últimamente y una gozada total para bailar destrozando vasos de plástico y chutando paredes (a poder ser en Razz, ejejejje).