Debo decir que tratar de escuchar o tan solo oir este disco entero, puede provocar tranquilamente algunos derrames cerebrales y nuevas incorporaciones a las bibliotecas...creo, aunque eso sea aventurarse demasiado, ¿no?.
Salvo el primer single, hit previo al susodicho, himno de gimnasios y concentraciones de filósofos varios, Party Rock Anthem, y que la petaba con un clip molongui y burro, basado en las pelis de zombis, el resto es una repetición de esquemas de lo más cansino y odioso que he podido escuchar en mucho tiempo.
No es demasiado lo mío eso de criticar para mal demasiadas cosas, y aunque como he dicho al principio, no he podido resisitirme a mover el cucu con su actual single, recomiendo fervientemente que nadie pierda el tiempo con esta puta mierda. No lo salva ni el mismísimo Calvin Harris, que forma parte de ese desastre titulado Reminds Me Of You.
De haber visto la portada, para nada engañosa con el nivel de sus adentros, debería haber evitado intentar tragarme esto.