Es cierto, la música de Ryan Adams no va a correr las fronteras de la música pop ni un poquito. Pero en sus mejores momentos es fácil de llevar y hay buenas canciones, lo que no es poco.
Este muchachito clase 74 oriundo de Jacksonville, en North Carolina, lleva editada una docena de discos firmados en solitario o acompañado de The Cardinals, su banda de apoyo. De todos ellos, el segundo, "Gold", sigue siendo su clásico. Y el disco más vendedor, a la fecha, de todo su catálogo.
Sonido limpio, cristalino y unas canciones que suenan sin complejos en ese plan pop/ rock con leves toques Alt Country que tanto le gusta practicar a Ryan. Otro de los méritos aquí es la versatilidad de su registro: como cantante, puede pasar de la dulzura en las baladas a algo más blusero o rockero con la mayor soltura. Yendo al tracklist, "New York New York" le salió redondita para declararle su amor a la ciudad que tanto aparece en sus canciones. Y "Firecraker"es igual de contagiosa, con armonicas, acústicas y un giro pop natural.
"Quise grabar un clásico contemporáneo" declaró Adams. Pretencioso o no, la atemporalidad que logra en varias canciones ("Answering bell", los aires blues/ gospel de "The rescue blues", el vaivén de "La Cienaga just smiled" o la bella "When stars go blue") nos hace quedar siempre un rato más al lado de esta música ideal para Coffee Shops y caminatas por la gran ciudad.
Además de producir a otros artistas, Adams lleva publicados dos libros de relatos y poemas. En 2011 estará editando su nuevo álbum, "Ashes and fire".
Discografía cercanaHeartbreaker (2000)- Gold (2001)- Demolition (2002).