El mejor disco para viajar de todos los tiempos
En 2012 tuve la suerte de viajar por tercera vez a Europa.Conecté las distintas ciudades de mi itinerario por el medio de transporte que sigo pensando que es el mejor y más bonito: el tren.
Por ese medio viajé de París a Amsterdam, de Amsterdam a Berlín y de Berlín a Praga, en un tramo bellísimo a través de los campos verdes de Bohemia.
En los viajes, conectado a los auriculares, dejé correr entero "Minimum maximum", el doble en vivo que Kraftwerk editó en 2005. Promediando el disco llegué a una conclusión que no me pareció nada exagerada, ni en ese momento de "epifanía Trans-Europa" ni ahora: es el mejor disco para viajar de todos los tiempos.
Música y velocidad. Movimiento y repetición de Krautrock. Excitación sensorial y placer derivado de la asepsia de la cabina (donde todo está en orden y el silencio hace ver el afuera como una película). Todo da como resultado un estremecimiento vital incomparable.
Algo más. Como registro, "Minimum..." supera el "greatest hits live". Esto es Kraftwerk lanzado al siglo XXI (algo que en apariencia puede sonar paradójico, tratándose de un grupo que siempre sonó en el futuro). Sonido superlativo, versiones que actualizan bien los temas, los aggiornan en el mejor sentido imaginable.
"Minimum maximum": más importante que tu pasaporte al día para viajar por la vieja Europa.