Disfrazar a una niña de niño para burlar al patriarcado

Por Pequelia @pequelia

A través del vídeo que encabeza este post podemos conocer a una familia de Afganistán, país centro asiático con mayoría musulmana del que muchos lectores han oído hablar por el dominio y posterior derrocamiento de los talibanes. Actualmente es un país conflictivo y se encuentra inmerso en una situación de guerra constante, la pobreza destaca especialmente y afecta a gran parte de la población, aunque esta familia vive acomodada y sin sufrir escasez en Kabul (capital del país) debido a que la madre es una ex-parlamentaria. Pero tienen un problema, al ser una sociedad de tipo patriarcal, sistema en el que los varones dominan sobre las mujeres, tener un hijo varón es muy importante, ya que asegura el futuro del linaje, ¿qué pasa si no se tiene un hijo varón y todos los hijos son mujeres? la solución pasa por disfrazar a las niñas de niños, algo que se ha realizado habitualmente desde hace siglos.

Nos habla Azita Rafhat, la madre de esta familia, explica que si tienes una cierta posición en la sociedad del país, la familia estará bajo la lupa de la sociedad en general. Como decíamos, es primordial tener un hijo varón, para ellos se trata de la culminación de la vida y la aceptación por parte de esta sociedad.
Cambiaron la vida de su hija convirtiéndola en un niño, le cambiaron la ropa, le cortaron el pelo y por supuesto se hizo un cambio de nombre, paso de llamarse Mehrnoush, a llamarse Mehran (nombre de niño). En apariencia es como cualquier otro niño (debe jugar y hacer cosas propias de niños), y esto es algo que parece ser perfectamente aceptado por esta sociedad, de hecho disfrazar a las niñas de niños es una práctica que se realiza en todos los estratos sociales.

Esto es algo que condenan los grupos de defensa de los derechos humanos, pero posiblemente no importa a esta sociedad patriarcal que a día de hoy sigue con la misma práctica. El periodista de la BBC identifica varios niños-niñas, podemos conocer además a mujeres que tras cumplir los 18 años pudieron recuperar su verdadera condición, pero hasta el momento han vivido bajo el yugo del patriarcado y están profundamente afectadas a nivel psicológico, basta con oír las declaraciones de una mujer que hasta hace poco era un hombre en apariencia. Sorprende escuchar cómo dice que si algún día se casa, será con un hombre violento pero será ella quien dé los golpes en la casa, delatando lo habitual que resulta este tipo de trato por parte de los hombres.

Al parecer, antes de tomar la decisión de disfrazar a una niña de niño, las madres piden a su Dios que les envíe un hijo varón, si tras la concepción, del parto nace una niña, la decisión está tomada. Esta es una costumbre arraigada que posiblemente violentará a más de un lector, es algo que va en contra de los derechos de los niños y personalmente creemos que atenta contra el individuo. De todo lo malo se puede sacar algo bueno, con esta práctica algunas niñas ven la sociedad desde otra perspectiva y toman conciencia del grave problema que pesa sobre las mujeres. Quizá sean ellas las que terminen con el sistema del patriarcado.