Por una parte, las realidades negativas que tenemos en común los seres humanos, como la xenofobia (impulsada por el miedo a lo desconocido) y el ansia de poder y de dinero. Por otro lado, lo positivo, que también se puede encontrar en la película: El amor, la familia, y, sobre todo, que todos (con nuestras diferencias incluidas) tenemos derecho a la vida.
Las referencias son múltiples, y es que, consciente o inconscientemente, podemos asociar ciertos pasajes de la historia a obras literarias como ‘La metamorfosis’ o a otras películas como ‘Robocop’ e incluso ‘La mosca’, además de la interminable lista de películas de alienígenas, por supuesto. Es más, incluso me atrevería a decir que por el modo en que está rodada, me recuerda por momentos a ‘En tierra hostil’, pero esto no son más que imágenes que se me vienen a la cabeza mientras veo la película. Supongo que, directa o indirectamente, estas obras (y muchas más) influyen de algún modo en el resultado.
La fotografía está muy acorde con lo que se pretende transmitir. No son imágenes románticas ni preciosistas, más bien crudas, reales, dando la sensación de que los alienígenas no son seres ajenos, sino parte de nuestra realidad.
La música, a cargo de Clinton Shorter, tiene un aire místico y esperanzador, además de los temas más trepidantes para los momentos de acción.
La evolución del personaje principal está muy bien realizada, tanto por la magnífica actuación de Sharlto Copley, como por lo estructurado y trenzado del guión, que consigue dar unidad y credibilidad a todo lo que sucede.
Así, el inicio es un rápido resumen de cómo llegó una nave extraterrestre a Sudáfrica cargada de alienígenas desnutridos y cómo planteó el gobierno la solución a su acogida. Pronto conoceremos a quien luego lleva el peso total de la historia (pero sin saberlo aún), que parece un hombre torpe e inseguro al que le otorgan una responsabilidad bastante por encima de sus posibilidades.
Su relación con los alienígenas y un incidente que tiene con un espray de procedencia extraterrestre es lo que desencadena una trama con más acción en su parte final. Se podrían contar muchos más aspectos de la historia, pero no quiero desvelar más (por si queda alguien aún sin disfrutarla).
‘District 9’, coproducción de Nueva Zelanda llena de referencias
Publicado el 25 julio 2014 por Maresssss @cineyear
Publicado en cineMUnDO / por Sergio Ceballos de la Torre / el 25 julio, 2014 a las 12:22 pm /