Normalmente no tienen otro uso mejor que servirme de apoyo en las fotos de las recetas, o para acompañar a los platos, por eso son decorativos. Ya sabéis que los que tenemos un blog de cocina acabamos siendo pequeños diógenes de los utensilios, guardamos todo tipo de platos, cubiertos, vasos etc, pero eso sí, de uno en uno, no os penséis que hacemos colecciones...
Bien, pues buscando algunos cubiertos "vintage", que siempre tenemos alguno por las casas, encontré algunas cucharas sueltas, modernas, lisas y muy muy brillantes (algo tremendamente horrible para hacer fotos), es decir justo lo contrario de lo que buscaba.
La palabra clave aquí es ODIO a lo BRILLANTE. Horror y terror si se me pone algo así delante del objetivo ...ya está, ya lo he dicho !.
El caso es que pensé que podía aprovecharlas dándole un cierto aire envejecido, así que aquí os voy a explicar paso a paso lo que he hecho con ellas y cuál ha sido el resultado para que podáis valorarlo vosotros mismos: