Llevamos ya casi una semana de la edición online del Festival de Documentales Docsbarcelona, y estamos metidos en una dinámica de visionados que, al final, se está haciendo frecuente en esta sucesión de festivales de cine que, reconvertidos en encuentros en streaming, van conformando una forma diferente de participar en un evento cinematográfico. Las historias se suceden, conectadas entre sí por un trabajo concienzudo de sus directores, con mayor o menor acierto, mientras que las reflexiones en torno a la actualidad del cine documental también son objeto de atención. Muchas de estas películas pasarán al olvido, seguramente, pero estos días tenemos la oportunidad de participar en una comunidad cinéfila que comparte gustos e intereses. Esa es la esencia de un festival, sea online o presencial. El fin de semana nos trae una pausa en las mesas redondas, aunque la próxima semana el festival dedicará más tiempo a las jornadas profesionales y la presentación de proyectos a posibles compradores o colaboradores. Pero continúan los estrenos diarios, con algunas de las películas más esperadas del festival.
Sección Oficial Latitud
La directora uruguaya Mariana Viñoles nos presenta una historia sobre refugiados en El gran viaje a un país pequeño (Mariana Viñoles, 2019). Los protagonistas son inmigrantes sirios que participaron en un programa de Ayuda Humanitaria promulgado en 2014 por el presidente José Mújica, y fueron trasladados a Uruguay, donde se les proporcionó vivienda y solidaridad. Pero la solidaridad a veces resulta inútil si no va acompañada de una infraestructura adecuada, y lo que parecía un sueño se acaba convirtiendo en una complicada supervivencia marcada por la nostalgia. La directora acompaña a una de estas familias, mientras vamos viendo también la experiencia de otros refugiados, y se pone de manifiesto, y eso es lo más interesante del documental, la inadaptación que sufren muchas de estas familias frente a otro tipo de cultura, otra forma de organización, otro modo de trabajar y convivir...Aunque propone una visión diferente de la que estamos acostumbrados en la plasmación de la vida de los refugiados (donde la mayor parte de los documentales se detienen, la llegada al país de acogida, es donde empieza esta historia), tenemos la impresión de que no se profundiza demasiado en esta falta de adaptación. La directora está en muchos momentos presente en las escenas, pero aquí resulta algo molesta su presencia, bien porque distorsiona la realidad que nos está mostrando, bien porque reflexiona en off sobre cosas que ya estamos viendo y que no hace falta subrayar.
Sección Oficial Panorama
Precisamente el artista y director chino Ai Weiwei abordaba el tema de los refugiados en el documental que lo colocó en el camino de los festivales internacionales, Marea humana (Ai Weiwei, 2017). En el pasado Festival de Sundance presentó su última película, Vivos (Ai Weiwei, 2019), un proyecto que es menos ambicioso que el anterior, y está más centrado en un relato particular: la desaparición de un grupo de estudiantes, que fue encubierta por el gobierno mexicano. El documental se detiene más en las familias de los desaparecidos que en la propia investigación de los hechos que ocurrieron. Es por tanto un acercamiento más personal, más emocional, que habla del dolor pero también de la esperanza (parece que infundada) de que los hijos van a aparecer vivos en algún momento. La cámara estática que nos muestra la difícil supervivencia de estas familias, parece simbolizar también ese tiempo detenido que viven los padres, ese paréntesis que no tiene cierre.Es cuando el documental se centra en la investigación, y las posibles implicaciones de la policía, el ejército y el gobierno en tratar de encubrir los hechos reales, lanzando una alocada versión que nadie se cree, cuando la música hace acto de presencia, cuando la cámara titubea, cuando el tono cambia. Pero resulta más interesante el acercamiento al dolor, algo parecido a lo que veíamos en Rising from the tsunami (Hélène Robert, Jeremy Perrin, 2019), pero sin ese trasfondo espiritual. El equipo de cineastas del que se rodea Ai Weiwei, que más que un director es una especie de coordinador en sus últimos proyectos documentales, consigue mantener, a pesar de la multiplicidad de miradas, una coherencia visual que ayuda a entender la historia. Posiblemente no hicieran falta casi dos horas de metraje si además no se va a profundizar en las implicaciones políticas del caso, pero hay una plasmación vital de la tristeza que logra capturar nuestras emociones.
Sección Oficial What the Doc!
En esta sección dedicada a las narrativas más singulares dentro del género documental, se presentó ayer Il varco (Michel Manzoni, Federico Ferrone, 2019), que pasó por la Mostra de Venecia del año pasado. Se trata de un singular experimento narrativo que en cierta manera nos recuerda a My mexican bretzel (Nuria Giménez, 2019), que pudimos ver en el D'A Film Festival. Porque igualmente utiliza imágenes de archivo para ir elaborando una narración coherente de una historia en particular.En este caso, Il varco se centra en la participación de la Italia fascista en la invasión de la Unión Soviética por parte del ejército nazi, concretamente con el envío de miles de soldados al frente de Ucrania. Y nos cuenta en particular la historia de uno de estos soldados, hijo de madre rusa, cuya visión del conflicto irá cambiando paulatinamente. No se trata de una historia real personal, sino que es una ficción construida a partir de las experiencias reales de varios soldados.
La utilización de imágenes de archivo y la creación narrativa a partir de ellas es habitual en la filmografía de los directores, pero aquí consigue un resultado especialmente llamativo. Hay un efecto casi hipnótico en el uso de estas imágenes, en la voz en off del protagonista, en la música y la ambientación sonora creada por Simonluca Leitempergher... El ritmo de la historia también consigue una narración sin demasiados momentos de pausa, excepto aquellos reflexivos en los que está presente la figura de la madre. Es una obra singular con resultados más que notables.
El gran viaje al país pequeño se puede ver en Filmin hasta el 25 de mayoVivos e Il varco se pueden ver en Filmin hasta el 26 de mayo.Estrenos Domingo 24:
Winter journey (Anders Østersgaard, 2019)
Suspensión (Simón Uribe, 2019)