Increíble pero si esta toda la playa vacía. Y estaba. Quien lo decia transportaba sus bártulos alejándolos de la toalla que le habían plantado a diez centímetros de la suya y añadía si es que no me lo puedo creer. Y yo que la oía paseando pensaba, pues yo si. Es más, es una ley de Murphy inexorable y no podemos evitarla: somos "sociables".
Da igual que la playa este solitaria, quien ha escogido un lugar sabe algo que ignoramos y hay que arrimarse. Ocurre con los restaurantes. La mesa ocupada debe ser la mejor. Hay que acercarse a ella lo máximo aunque el resto este vacío. Vale que están debajo del aire acondicionado y a ti te sienta fatal o que lleguen olores de la cocina, si están ahí será por algo.Y a un grupo que mira algo, lo que sea, ¿Quién se resiste a acercarse? Tod@s pecamos de ello. Yo también. Sin ir más lejos el otro día en Optica Páez. Estaba muy entretenida desordenándoles las gafas de un stand y fotografiando el resultado con vistas, nunca mejor dicho, a una entrada que tendré que dejar para otro día porque la ley se cumplió. Al fondo de la óptica estaban "ellas". Las oía, las veía cogiendo gafas, comentando la nueva colección de Dolce & Gabbana y cuando me quise dar cuenta, pegadita a "ellas" que estaba: aconsejando, eligiendo y ya, todas en conversacion, vencí mi timidez y pedí a una de "ellas" que posara.Y es que hay otra ley: la gente es amable, tambien vencen su timidez por amabilidad y el deseo de hacer un favor. De eso hablaré otro día. Hoy solo quería hablar del dolce estilo de Dolce & Gabbana y mostraros el dolce estilo de "ella".