Dolor e indignación por la muerte de una joven, con diabetes y Covid-19 que esperó una cama acostada en el piso de un hospital

Publicado el 25 mayo 2021 por Diazflocco

Una noticia que publicó Infobae este lunes, generó dolor e indignación. Se trata de la muerte de una joven de 22 años que padecía diabetes y contrajo coronavirus. Durante varios días, recorrió hospitales tratando de conseguir una cama para internarse debido a que tenía los pulmones afectados, sin embargo, cuando la consiguió ya fue demasiado tarde.

Lara Arreguiz era una estudiante de veterinaria que contrajo el virus y que pese a integrar el grupo de riesgo, no recibió la vacuna. Con el correr de los días comenzó a tener problemas para respirar ya que se ahogaba y no lograba conseguir una cama en un hospital para ser internada. Mientras esperaba que la atendieran en uno de los centros de salud, tuvo que acostarse en piso porque su cuerpo no le respondía.

Claudia, su mamá, contó que los enfermeros le negaron usar una camilla que había en el pasillo «por protocolo». Por ese motivo, la joven de 22 años no encontró otra opción que hacerlo en el suelo. Una mujer que se compadeció de esa escena, se sacó la campera y la tapó con ella, sin importarle que estuviera contagiada con Covid-19.

Ella era Lara. Tenía 22 años. Necesitaba estar vacunada porque era insulinodependiente, pero su vacuna se la robó Zannini haciéndose pasar por personal de salud. Ella murió tirada en el piso. Él celebra. Señores, ni olvido ni perdón. pic.twitter.com/a1xSa0FNlT

— Diego Álzaga Unzué (@atlanticsurff) May 24, 2021

Cuando logró ser internada, sus pulmones ya estaban muy comprometidos. Su padre, Alejandro cuenta que los médicos le decían que era una chica joven y que iba a resistir. Sin embargo, luego la pasaron a terapia intensiva y la entubaron. En cuestión de horas, le avisaron que Lara había muerto luego de sufrir tres paros cardíacos.

La noticia del fallecimiento de la estudiante generó indignación en las redes pues los internautas cuestionaron el vacunatorio vip y recordaron todos los políticos que se inocularon sin pertenecer a ningún grupo de riesgo. La principal crítica recayó sobre Carlos Zannini, procurador General del Tesoro quien se hizo pasar por personal de salud para inocularse.