Los vinos rosados son como un pavo real que en épocas de verano despliegan su seducción a su máximo esplendor. Y allí me dejo yo seducir embelesada por sus aromas, sabores y color.No es que todos los vinos rosados disponibles en el mercado quebequense me encanten, pero últimamente he descubierto que hay muchos a los que se le debe dar la maravillosa oportunidad de disfrutar. La región por excelencia sigue siendo en mi opinión la Provence en Francia. Es en ese terruño de suelos ricos en minerales, de paisajes de ensueño y clima mediterráneo que los vinos rosados se destacan del resto. Un fabuloso vino que tuve la ocasión de degustar una de estas tardecitas calurosas del verano montreales es el rosado de Domaine Houchart 2015, de Vignobles Famille Quiot. De apelación de origen Cotes de Provence, este blend de uvas Grenache, Syrah, Cinsault y Cabernet Sauvignon es un deleite para todos los sentidos.Una nariz de gran bouquet, con perfumes florales de violetas, rosas y geranios que desborda de perfumes. En boca, su toque mineral y persistente acidez equilibran los sabores frutales, dándole una elegancia y untuosidad destacable. A esta paleta de sabores y aromas, me ha gustado agregar aún más colores a esta deliciosa degustación. Es así que lo he acompañado de queso azul y aceitunas verdes. ¡Un verdadero maridaje multicolor! MLF Domaine Houchart Provence 2015 17,50$ en la SAQ