¿Dónde ir al sol en diciembre? Una cuestión cuya relevancia aún no se ve cuestionada por el calentamiento global. A continuación se ofrecen algunas respuestas que tienen en cuenta la necesidad de luz solar y la necesidad de accesibilidad. Los ganadores no nos impiden deslizarnos: Omán, pero también Dubai, por ejemplo. Ciudad del Cabo, Costa Rica, Yucatán, Maldivas, Cabo Verde, Zanzíbar o Florida son senderos que los Viajeros seguirán a su antojo.
- Omán
- Ciudad del Cabo, Sudáfrica
- Costa Rica
- Yucatán, México
- Maldivas
- Cabo Verde
- Zanzíbar, Tanzania
- Florida, Estados Unidos
1
Omán
En Omán, la cuestión no es si el clima es agradable y cálido. El clima es agradable y más o menos cálido. Diciembre pertenece a los meses buenos, durante los cuales el calor es soportable. Con este clima agradable, paisajes impresionantes. Un mar cuyo brillo azul real te deja infinitamente onírico; un desierto todavía árabe, como Wahiba Sands; montañas fuertes que forman un laberinto, como el Jebel Akhdar, salpicado de pueblos agrestes y antiguos fuertes. Con, aquí y allá, el fresco resplandor de una vegetación inesperada. Y el Oriente de los zocos, las especias, las telas, la latón, el oro y ahora la electrónica. El de Nizwa, todavía tradicional, funciona una vez a la semana como un animado mercado de ganado. El de Muttrah, en Mascate, rebosa comercio universal. La de Al Hamra, donde se elabora la halva. Para colmo, hoteles de diseño y eco-responsables, tiendas de campaña que no han abandonado el espíritu beduino, una logística a la vez eficiente y discreta. Los viajeros pertenecen a la historia, la cultura y la riqueza de Omán.
©Martin Sasse, laif
2
Ciudad del Cabo, Sudáfrica
Ciudad del Cabo y su región se benefician de un clima de tipo mediterráneo, con veranos calurosos y soleados. Y diciembre, en el sur de África, es verano. Las estaciones se invierten ya que la gente tiene los pies en alto y la cabeza agachada. Tenemos suerte porque, en Ciudad del Cabo, el sol brilla sobre la Sudáfrica más bella. La ciudad aún vive la historia y el futuro del país, en un equilibrio tembloroso. Seducciones de todo tipo y estilo de vida oceánico. La Montaña de la Mesa se elevará. Playas para descansar. Hablando de esto último, el agua del Atlántico pellizca un poco y vigoriza; al este de la península es más suave. Entonces somos deporte por un lado y pereza por el otro. Se llega a los viñedos cuya excelencia ya no es necesario elogiar. La Garden Road, esta maravilla de la naturaleza y la ingeniería civil, comienza no muy lejos, en Mossel Bay, y termina a orillas del río Storms. Buen paseo. Además, si en el desierto del Kalahari es temporada de lluvias, los chubascos y las tormentas sólo ocupan el cielo de forma esporádica. La humedad mantiene la excepcional flora y fauna de las sabanas xerófilas.
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3
Costa Rica
La estación seca comienza en diciembre. Este mes es, por tanto, la apertura de Costa Rica. La espléndida naturaleza del país tiembla. Podemos disfrutarlo en todo su esplendor. El nivel de humedad en el aire baja un nivel. Y el bienestar aumenta en consecuencia. Porque el país invita a la felicidad de vivir con sencillez en un entorno que no sólo se preserva sino que florece en ecosistemas fascinantes. El turismo costarricense es verde por partida doble: por su profusa vegetación y por el espíritu que lo anima. Los viajeros ecosensibles encuentran en Costa Rica una tierra para explorar sin segundas intenciones y un parque de juegos de gran tamaño. Las actividades físicas al aire libre son obvias en tal contexto. Ríos turbulentos, volcanes, marquesinas gigantes, áreas inundadas, selva en una palabra, brindan oportunidades más que suficientes para emociones fuertes de todo tipo. ¿Quién no ha soñado con ver pasar una bandada de guacamayas rojas en la vida real en la península de Osa? ¿Bajar en balsa por el río Saraquipi o descansar en la costa caribeña? ¡Es hora!
Celso Diniz
4
Yucatán, México
Los meses más calurosos son de marzo a octubre, y la primavera y el otoño son los períodos más húmedos, por lo que diciembre favorece a Yucatán. La Riviera Maya recibe a los viajeros con la suavidad, la comodidad y la naturalidad de zonas que la industria no ha transformado en silos junto al mar. Ver la Bahía de Akumal, ir a Tulum. Las playas se extienden entre fondos marinos multicolores que bastan con unas aletas, una máscara y un tubo para explorar. Todo contribuye a un placer elegante y perezoso. Y luego, por supuesto, están las maravillas mayas y toltecas. Chichén Itzá a la cabeza, pero no sólo eso. Este gran conjunto actúa como buque insignia rodeado de otros barcos de línea: nuevamente Tulum, Cobá, Calakmul, Uxmal y Puuc, etc. ¿Quieres probar una cocina creativa, diferente y con una técnica fiable? Ve a Mérida. Una deliciosa emulación reina entre las cocinas. En cuanto al estilo colonial español, los criollos de Valladolid fueron lo suficientemente prósperos como para dejar a la posteridad un hermoso legado. Aún deberíamos hablar de la costa norte pero… Vamos.
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5
Maldivas
La temporada de lluvias termina en noviembre, diciembre te permite acercarte a un paraíso hermoso y limpio. Entonces seremos los primeros habitantes. Edénico. Los hoteles han sido renovados, las playas brillan con un blanco puro, los cocoteros están llenos de jugo, el agua ha recuperado toda su transparencia. Todo está preparado para relajarse, como sólo el Océano Índico está en reserva. Una suave brisa suaviza el calor y el mar vuelve a tener la temperatura adecuada. Clásicamente practicamos las Maldivas en parejas. ¿Será que no se comparten? Digamos que ofrecen el marco ideal para cosas que generalmente nos guardamos para nosotros mismos. Sin embargo, el altruismo no está en absoluto reñido con viajar a las islas, ahora es posible plantearse un crucero en familia, o con amigos, en un dhoni, un barco tradicional de madera, diseñado para el transporte relajado de pasajeros. Pequeña capacidad, comodidad, tripulación atenta, paradas en playas de encuentro o sorprendentes lugares para practicar snorkel. Chic nómada.
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6
Cabo Verde
Cabo Verde, un archipiélago atlántico donde las temperaturas son suaves en diciembre, quizás no sea el destino que primero le viene a la mente. Y aún así. Carácter de sobra y aguas de un azul que no solemos asociar con este océano. Viento, eso sí, es necesario mantener el cielo despejado. La isla más grande es Santiago. Más bien vamos a Sao Vicente, Santo Antao, Sal, Fogo… Por las playas, pero también por los impresionantes paisajes de relieves volcánicos, formaciones vegetales únicas, una vida tradicional todavía dura y precaria, pero siempre llena de disponibilidad humana. Caminamos tanto en el interior como nadamos en las afueras. La impronta portuguesa está ahí, presente. Ayudó a definir estilos musicales populares y platos de libros de cocina locales. Aspectos que ahora se conocen en Europa pero que, degustados allí, tienen un sabor completamente diferente. Cabo Verde no puede limitarse a ninguno de sus perfiles, sino que debe considerarse como un todo del que no pueden disociarse los distintos elementos. Una especie de archipiélago total, capaz de mejorar seriamente tu fin de año.
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7
Zanzíbar, Tanzania
Fuera de temporada con lluvias insignificantes, diciembre es un buen momento para descubrir la isla y tomar el sol en ella. Los viajeros ya no llegan a Zanzíbar en dhow, y es una pena, pero los tiempos están cambiando. Por otro lado, en Stone Town, la antigua capital, aún se siente la época del gran comercio de antaño entre Arabia y la costa suajili. Huelemos las especias que literalmente se amontonan en los puestos y que hablan de India, Yemen, África. Escuchamos a Bob Marley y los muézines. Europa se está desvaneciendo. Desde la terraza de la azotea (quizá nació aquí la idea de un bar en la azotea), donde tomamos té, el casco antiguo es muy bonito. Sin embargo, debes alejarte de su contemplación, porque tu tumbona te espera en una de las maravillosas playas de la costa este. La arena blanca calienta los pies, las luces del sol brillan en el océano. ¿Qué hacer sino disfrutar de este tratamiento emoliente? Sin embargo, no muy lejos se encuentra el arrecife, cuya vida rebosa de formas y colores. Tarde o temprano será necesaria una visita submarina, no se puede perder el encuentro de anémonas y rayas.
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8
Florida, Estados Unidos
La ventaja de los países desarrollados en varios paralelos es que siempre hay un rincón donde hace buen tiempo. En Estados Unidos en diciembre, Minnesota no (aunque puede haber días muy bonitos de sol frío), Florida sí. No se trata de presentar Florida, ¿qué se puede decir que no se haya dicho? Miami, los Everglades, Disney World, los Cayos (Key West es el lugar ideal si buscas la inmortalidaddice Bob Dylan), Cabo Cañaveral forma parte del mejor patrimonio mundial compartido. El que decide en el compartir universal de sensibilidades. Y atenerse sólo a lo que se le ocurra espontáneamente. El estado tiene mucho más que ofrecer: Pine Island, Rainbow Springs, Gainesville, Amelia Island, etc. No es egoísta, incluso podría sugerirle que el período también le permite viajar a Cuba en excelentes condiciones climáticas. Pero volvamos a nuestros manatíes y convenzamos de que un pequeño viaje de regreso a Florida sería una gran idea. O un primer paso. Después de todo, ¡tenemos suerte de tener todavía el Estado del Sol por descubrir!
Foto de portada: franckreporter/Getty Images/iStockphoto
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